| sábado, 16 de octubre de 2004 | Zona oeste Cruento robo en un taller de costura Cuando las empleadas del pequeño taller de costura de pasaje Jean Jaures al 5300, a la altura de Camilo Aldao al 3100, llegaron ayer para encarar el último día de trabajo de la semana no imaginaron el mal trago por el que iban a pasar. Poco después de las 6.20 y con las primeras luces del alba, una de las trabajadoras vio, antes de ingresar al pequeño taller, que muy cerca de la puerta estaban dos muchachos de menos de 20 años. Los jóvenes tenían la cabeza cubierta por la capucha de sus buzos. Trató que la apariencia sospechosa no la desubicara, pero en un abrir y cerrar de ojos los delincuentes la redujeron y la metieron en el local. Luego de forcejear y de golpear a algunas de las empleadas, los ladrones se hicieron con 400 pesos y dejaron mucha angustia tras ellos. Una de las mujeres fue herida con un culatazo en la cabeza.
Cuando una de las empleadas llegó a su trabajo en el pequeño microemprendimiento de costura vio a dos "muchachos encapuchados" cerca de la puerta de entrada, pero intentó que la sospecha no la paralizara. Cuando comenzó a entrar al taller, pasó lo menos querido. Los jóvenes la encañonaron y la metieron a la fuerza hacia adentro. "Calladas la boca", le habría dicho uno de los delincuentes antes de comenzar a despojarlas de poco dinero que tenían la mujeres.
Pero Adelina Lucero, una trabajadora de 54 años, no pudo contener la indignación y comenzó a forcejear con los delincuentes. "Estos no se la van a llevar de arriba", se disparó en su cabeza y se trenzó en una desigual pelea entre las máquinas de coser, que terminó con la mujer herida en su cabeza con un culatazo. Un mal menor si se piensa que los dos sujetos pudieron usar las armas de otra forma.
Los delincuentes se fugaron con cerca de 400 pesos y algunas joyas que les sacaron a las empleadas. enviar nota por e-mail | | |