Defensa justificó el accionar de las tropas argentinas en Haití

Se recupera el marinero herido de un balazo al repeler un ataque de un grupo rebelde de la isla

Mientras el marinero Apolinario Gabriel se recuperaba satisfactoriamente del balazo que recibió en el brazo en Gonaives (Haití), el ministro de Defensa, José Pampuro, justificó ayer el accionar de los soldados argentinos apostados en Haití, que repelieron el ataque de un grupo rebelde, y reconoció que la situación en la isla es "complicada".

"Esto está bien claro en la resolución de las Naciones Unidas. Cuando las unidades militares participan de Fuerzas de Paz hay una reglas de empeñamiento que son las normas que rigen esta actividad. Frente a un ataque directo, dentro de las normas, está la defensa de nuestros hombres o de las personas que son agredidas", explicó Pampuro.

El sábado último, una patrulla argentina fue atacada a balazos en Gonaives cuando desarmaba una barricada instalada por los rebeldes haitianos. Según se informó en el Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, las tropas argentinas repelieron el ataque tirando al lugar de donde salió el fogonazo, ya que era de noche y no se pudo detectar a los agresores.

Esto se constituyó en el primer acto que podría calificarse de enfrentamiento que involucró a los argentinos desde que llegaron a Haití. Antes habían tenido que disparar al aire para disipar tumultos cuando repartían alimentos en el marco del desastre que produjo un huracán.

En Gonaives se encuentran apostados 450 soldados argentinos, que se suman a los 50 tripulantes del buque Bahía San Blas apostados frente a la ciudad, los 57 médicos y enfermeros del Hospital de la Fuerza Aérea en Puerto Príncipe y a los 40 pilotos de helicópteros en la capital haitiana.

Por su parte, Pampuro reconoció que la operación que llevan adelante las tropas apostadas en Haití es "complicada" y no descartó que la situación en el país caribeño "pueda ponerse más difícil" para los efectivos.

Señaló que Haití "se está reestructurando políticamente y las internas comienzan a aparecer con un poquito más de virulencia". El ataque al efectivo argentino es "en principio, un hecho aislado que no le traerá mayores y consecuencias", admitió el funcionario.


Ansioso por volver a su puesto
Ayer, en tanto, el marinero de primera Apolinario Gabriel se recuperaba en el Hospital Reubicable de la Fuerza Aérea, en Puerto Príncipe, del balazo que recibió en un brazo.

"Gabriel está muy bien, ya camina y está ansioso por volver a su destino en Gonaives", indicó el vicecomodoro Rubén Sassone.

Gabriel dijo que fue atacado "mientras hacía un patrullaje para ver cómo había quedado la ciudad luego de un día difícil, con muchas manifestaciones por la visita del presidente haitiano Boniface Alexander".

El miembro de la misión de paz argentina afirmó que "cuando nos atacaron, la calle estaba desierta y muy oscura. Caí herido y seguí disparando desde el piso como pude, porque tenía que protegerme". (DyN)

José Pampuro, ministro de Defensa, junto a una patrulla de las Fuerzas de Paz.