Se reabriría la causa por la misteriosa muerte de Lourdes Di Natale

El abogado de la familia de Lourdes Di Natale pidió a la Justicia que reabra la investigación por la muerte de la mujer, quien fue secretaria de Emir Yoma, cuñado del ex presidente Carlos Menem, ocurrida hace un año y medio al caer desde una ventana al patio interno del edificio en el que vivía.

El abogado Rodolfo Chimeri Sorrentino presentó ante el juez de instrucción Ricardo Farías el pedido de "desarchivo" de la causa, cuestionando la investigación, y a un nuevo testigo que podría aportar pruebas sobre las circunstancias de la muerte.

El nuevo testigo es el periodista Cristian Sanz, dueño de un sitio de internet denominado Periódico Tribuna, cuyo relato propuesto "podría constituir una confesión sobre el hecho de sangre del que resultara víctima Di Natale", indicó el letrado.

El abogado sostiene en su escrito que la muerte caratulada de "accidental" no fue debidamente investigada y no se hicieron las pericias correspondientes, al tiempo que recuerda que en el cadáver apareció una dosis de alcohol en sangre que hubiera hecho imposible su traslado hasta el balcón y su intento por cortar un cable -como se dijo- con una tijera.

Di Natale se hizo notoria cuando denunció públicamente a su ex jefe, Emir Yoma, y a varios colaboradores de Menem por el tráfico de armas y otros presuntos hechos de corrupción de ese período gubernamental, del que sostenía tener pruebas fehacientes y haber sido testigo directo.

La denuncia de la mujer, ex pareja del abogado Mariano Cúneo Libarona, con quien tuvo una hija cuya custodia se le había quitado poco antes de su muerte, había sido desechada por la Justicia. En el escrito que ahora presenta el abogado de la familia se desliza nuevamente la hipótesis según la cual la muerte de la ex secretaria de Emir Yoma no fue accidental y hace hincapié en lo que denomina "orfandad de diligencias" para probar cómo murió Di Natale.

Chimeri Sorrentino enfocó su pedido en una pericia toxicológica practicada por un médico forense que indicó que el cadáver de Di Natale "presentaba 3,15 gramos por litro de alcohol en sangre, estando la víctima dentro del tercer período de la fase llamada ebrioso agudo".

En ese estado, apenas inferior al "coma alcohólico" (3,5 gramos por litro, que puede producir la muerte por intensa depresión cardiorrespiratoria), normalmente una persona apenas si podría moverse, según coincide la ciencia.

Pero con ese grado de alcohol en sangre, según las investigaciones hasta ahora, Di Natale se habría trepado a una ventana y habría sacado la mitad de su cuerpo al exterior y estirado sus brazos para alcanzar un cable de televisión que estaba a unos tres metros, con un cuchillo cuya hoja medía diez centímetros.

La ex secretaria de Yoma murió el primero de marzo de 2003; ese mismo día, la testigo Josefa Ibarra, "la última persona que vio con vida a Lourdes" -se indicó-, estuvo con ella desde las 14 hasta las 15, es decir poco antes del trágico desenlace.

Según declaró en el expediente, "la vio muy bien de ánimo, también manifestó que no vio botellas de bebidas alcohólicas" en el departamento de la calle Mansilla al 2300.

Chimeri Sorrentino explicó en el escrito que varios testimonios coinciden en que Di Natale no era adicta al alcohol y citó como ejemplo al de la actual titular del Pami, Graciela Ocaña: "Manifestó que en el marco de varios encuentros de trabajo que mantuvo con ella jamás vio bebidas alcohólicas en su residencia, ni notó en ella estado de ebriedad alguno".