Según una encuesta, los adolescentes imaginan un futuro poco alentador

Una encuesta entre 500 adolescentes de la provincia de Buenos Aires demostró que la mayoría intuye un futuro poco alentador y piensa que no alcanzarán el mismo nivel de vida que con sus padres.

La encuesta fue realizada por un pediatra y una psicóloga del Hospital Cecilia Grierson de Guernica, que salieron a recorrer las escuelas públicas de la zona y encuestaron a cerca de 500 adolescentes que cursaban los últimos años del polimodal.

Los primeros resultados del relevo fueron poco alentadores: la mayoría de los jóvenes de Guernica pensaba que no iba a alcanzar el mismo nivel de vida que tenían con sus padres.

También manifestaron miedo al futuro y más dudas que certezas a la hora de formar una familia, conseguir un empleo y afrontar las responsabilidades que les tocará vivir.

"Los chicos no hacen más que escuchar que este país no da para más, que no hay trabajo en ningún lado y que de nada sirve estudiar una carrera universitaria porque hasta los profesionales están desempleados", explicó el pediatra Gabriel Pierro, impulsor del proyecto.

Para Pierro, especialista en adolescencia, "la sensación de desesperanza es generalizada y transmitida, consciente o inconscientemente, por los adultos que los chicos tienen como referencia, que no hacen más que hablar de corrupción, injusticia, impunidad y negociados".

Los médicos del Guernica, Pierro y la psicóloga Marcela Villano, trabajaron de marzo a noviembre del 2003 con un total de 5 mil alumnos de unos 13 EGB y 2 polimodales.

La primera etapa del proyecto consistió en una serie de talleres preventivos sobre salud e higiene y en la segunda, de la que participaron sólo los polimodales, desarrollaron la encuesta, sobre 500 jóvenes, e hicieron hincapié en las proyecciones a futuro.

La pregunta central de la encuesta indagaba acerca de los proyectos personales de los estudiantes, cómo imaginaban su vida en los próximos 10 años y qué objetivos les gustaría alcanzar.

Desconcertados frente a la falta de expectativas, los médicos proyectaron una película en la que otros adolescentes relataban cómo era su vida y cuáles sus dificultades y abrieron un debate en el interior de las aulas. (Télam)