| sábado, 09 de octubre de 2004 | La invasión a Irak El reciente informe del jefe de inspectores de las Naciones Unidas en Irak determinó la inexistencia de armas de destrucción masiva en ese país antes de su invasión. Este había sido el motivo principal por el cual se justificó la invasión a Irak por parte de los Estados Unidos y del Reino Unido. Paradójicamente, la televisión alemana (DW) difundió hace unos días un programa donde se denunciaba que tanto los Estados Unidos como el Reino Unido habían utilizado municiones con uranio empobrecido en los bombardeos a Irak. La radiactividad que desprenden estas municiones repercutirán durante muchos años en suelo iraquí. Tal es así que en Basora, cuando nace un niño, las madres no preguntan de qué sexo es sino si es sano o no. En presencia de la televisión alemana se detectaron niveles de radiactividad 25 mil veces superior al normal en los restos de los tanques de guerra y en algunas construcciones que habían sido bombardeadas con estas armas. Lo más serio no es sólo la secuela que esto dejará en los soldados y en la población iraquí sino que los invasores, que utilizaron el pretexto de las armas de destrucción masiva, son en definitiva quienes las utilizaron.
Luis Lant
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