| lunes, 30 de agosto de 2004 | Incidentes e insultos La marcha de la bronca de los hinchas La gente exteriorizó su malestar y descontento por la situación que vive el club José M. Petunchi / La Capital Central padeció una semana por demás complicada. Desde lo futbolístico, por la hiriente derrota en el clásico y el posterior alejamiento del técnico Víctor Púa, aunque esa partida intempestiva no fue por el resultado sino por que no se sintió respetado por la dirigencia. Desde lo institucional, por el complejo panorama que afronta en el tránsito de la convocatoria, que hasta ahora derivó en embargos y pedidos de quiebras personales a directivos, lo que también disparó versiones de renuncia de, al menos, uno de los integrantes de la mesa directiva. Y ayer, como para completar este acuciante cuadro de situación, lo completó con una derrota lacerante ante Almagro, un equipo limitadísimo y que es uno de los grandes candidatos al descenso. Por eso no fue extraño que, ante otra frustración deportiva, el ambiente hiciera eclosión y que la gente exteriorizará toda su bronca y su intolerancia luego de un campeonato entero en que el equipo no gana en su estadio. La derrota profundizó la herida futbolística que arrastra desde hace varios meses. Una crisis a la que si no le encuentran rápida solución puede tener consecuencias imprevisibles a corto y mediano plazo.
A esa altura el ambiente festivo con la vuelta de don Angel Zof al banco canalla luego de siete años había quedado archivado en el cajón de los recuerdos, absorbido por una realidad que asfixia y por momentos exaspera. Una realidad que arrancó casi desde el mismo momento en que el presidente Pablo Scarabino tuvo el desafortunado tino de calificar de "mediocres" y "reemplazables" a una camada de jugadores que le había dado los mejores momentos de gloria de la última época al club. Y que fueron desechados para traer a 7 jugadores de los cuales sólo el Chacho Coudet es titular. Y Clarence Acuña, que llegó lesionado, podría serlo en los próximos encuentros.
La tensión explotó cuando Almagro hizo el gol. Los hinchas de la platea que da espaldas al río Paraná reaccionaron con insultos y algunos proyectiles contra los dirigentes, mientras el partido se jugaba. La exasperación fue corta pero importante, a punto tal que un cordón policial debió separar la platea del palco oficial, mientras que los plateístas de ese sector abandonaban el lugar procurando escapar de los elementos que tiraban desde la platea superior hacia el palco.
El descontrol de esos minutos fue tal que cuando estaba en el banco Vitamina se puteó con un hincha (ver aparte) y que entre los propios plateístas que dan a Cordiviola hubo algunas escaramuzas que no llegaron a mayores, aunque alcanzaron para determinar la sensación térmica que se vive entre los hinchas. Este incidente que tuvo a Vitamina como epicentro marcó el estado de ánimo de la gente, que no deberá perder de vista que los que menos responsabilidad tienen en esta situación son los futbolistas y el cuerpo técnico.
Central terminó la semana como la empezó: a los tumbos e inmerso en una profunda crisis, que ayer disparó el descontento de sus simpatizantes en forma de bronca. enviar nota por e-mail | | Fotos | | Pese a la derrota, los hinchas aplaudieron a los jugadores, pero se descargaron con los dirigentes. | | |