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 lunes, 30 de agosto de 2004

En la misma casa viven 16 personas
Denuncian que un remate irregular dejará a varios chicos y adultos en la calle
La Asociación en Defensa para la Vivienda Unica afirma que se digitó la subasta, pero la Justicia avaló el proceso

Una familia compuesta por 16 integrantes, 8 de ellos menores de edad, está a punto de quedar en la calle. La casa que habitan en pasaje García 3430 fue rematada en el 2001 por una hipoteca de 8.500 pesos, por la que perderían la vivienda única subastada en 10 mil pesos. La Asociación para la Defensa de la Vivienda Unica (Adevu) impugnó en la Justicia el remate del inmueble debido a que "el martillero efectuó una adjudicación sin permitir la puja y en menos de un minuto". Ahora, la Cámara Civil dio por aprobada la ejecución hipotecaria lo que significará el inminente desalojo de los Basualdo. A partir de hoy, Adevu enviará cartas a autoridades provinciales y municipales para denunciar "el robo escandaloso e injusto de una casa" y en la semana montarán un carpa frente a Tribunales.

Los dolores de cabeza comenzaron en 1997. Jacinta Basualdo (66 años) es la dueña de la casa. Jacinto Toledo, el esposo de Marisa Basualdo (sobrina de la titular del inmueble), convenció a la titular del inmueble a hipotecar su vivienda única para obtener un préstamo privado de 8.500 pesos, del que sólo recibieron 5 mil y por una hipoteca que fue de 13 mil pesos.

Según indicó la propietaria del inmueble, Jacinta Basualdo, Toledo "usó la plata, nunca pagó y encima está preso". Frente a esto, la mujer de 66 años aseguró haberle pagado a Delcra SA "9.700 pesos hasta 1999" y ante la falta de recursos propuso pagar la mitad de la cuota mensual. Pero la prestamista se negó y Jacinta comenzó a recibir cédulas de intimación judicial. En el 2000, volvieron a pagar; esta vez un cheque de 4.484 pesos que la financiera aceptó como parte de pago.

El juicio de ejecución hipotecaria siguió su curso, Jacinta fue a la quiebra hasta que el 20 de abril del 2001 la vivienda única fue rematada. Adevu hizo una colecta para recomprar el inmueble de pasaje García 3430, pero le impidieron participar en la subasta y se quedaron afuera de la Asociación de Martilleros.

"Fue una adjudicación tan injusta como escandalosa", recordó el titular de Adevu, Marcelo Bonini, al subrayar que "el martillero Oscar Kovalesky se limitó a aceptar la oferta que le hizo una mujer escondida detrás de un ventilador, no permitió la puja con otros oferentes y bajó el martillo en menos de un minuto. No había mostrado la propiedad y no existían volantes en el lugar de la subasta".


Recurso de nulidad
Adevu presentó en la Justicia un recurso de nulidad en el acta del remate cuestionando su legitimidad, "incluso pedimos el video con la filmación del remate pero nunca apareció", recordó Bonini.

Ahora, la Cámara de Apelaciones en lo Civil resolvió dar por aprobada la subasta, otorgando la posesión del inmueble al comprador en el remate.

"Somos 16, de los cuales 8 son criaturas y quedaremos todos en la calle. Siempre demostramos voluntad de pago y nunca tuvimos respuesta satisfactoria, incluso ahora proponemos pagar 200 pesos al mes para conservar la casa", dijo desesperada Jacinta. En el modesto inmueble conviven adultos de 93, 69, 66, 43 y 33 años con menores de 15 a 4 años de edad.

Ante el inminente desalojo de la familia Basualdo, Adevu enviará hoy sendas cartas al presidente, al gobernador, al intendente y al Concejo Municipal, solicitará la mediación de la Corte Suprema y montará la semana entrante una carpa en Tribunales para concientizar a la opinión pública sobre este caso.

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En la casa de pasaje García conviven chicos de 4 con adultos de 93.

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