El terrorismo talibán fracasó en atemorizar a los votantes

Kabul. - Muchos afganos con documentación para votar fueron ejecutados por los talibanes, hubo auxiliares electorales asesinados a sangre fría, incluso los puntos para registrarse como votantes dentro de mezquitas fueron atacados con bombas. Pero los talibanes no van a poder impedir las elecciones presidenciales en Afganistán el 9 de octubre.

El próximo domingo finaliza el registro de votantes con un éxito que no esperaban ni los más optimistas. Aun así, estos comicios, los primeros democráticos en la historia de Afganistán, están plagados de problemas. Pese al terror instaurado por los talibanes, más de 9,6 millones de los 10,5 millones de afganos con derecho al voto se han registrado para acudir a las urnas. Después de un comienzo lento, en parte debido a la insegura situación en el país, las elecciones fueron aplazadas de junio a octubre. Se instauraron nuevos puestos de registro en regiones rurales, tras lo cual se produjo un avance espectacular: algunos días se llegaron a emitir más de 100.000 documentos de votación. Para muchos afganos, éste es el primer documento con foto propia que tienen, algo que muestran llenos de orgullo.

Pese a las irregularidades denunciadas, como registros múltiples, el proceso se considera un éxito debido a que en total más del 40 por ciento de los afganos registrados son mujeres, quienes hace tres años seguían brutalmente oprimidas por el régimen talibán. Pero si se mira hacia el sur, donde los talibanes cuentan con los apoyos más fuertes, se revela una imagen sombría: en 18 de los 44 distritos de las cinco provincias sureñas, donde las oficinas de registro electoral llevan en algunos casos abiertas desde mayo, hasta comienzos de agosto no se había registrado ni una sola mujer. (DPA)