Médicos bonaerenses no atenderían a los raptores

Los médicos bonaerenses alertaron ayer que podrían no atender más a los secuestradores que necesiten un tratamiento, amparados en "razones de conciencia" que les impide asistirlos por la gravedad del delito que pesa sobre los malhechores.

El secuestro aún no resuelto de Nicolás Garniel, el chico de 17 años hijo de dos profesionales de San Isidro, puso de relieve la problemática de los médicos ante el escenario de tener que cuidar la salud de delincuentes.

El cautiverio de Nicolás, por cuya liberación exigen 300 mil pesos, "afecta a toda la comunidad de la medicina", dijeron los médicos bonaerenses, al ofrecer a la familia del chico "todo el respaldo moral y efectivo".

La advertencia hace temer que violen el juramento hipocrático. Es que ellos juran que la salud de los pacientes "será el objetivo prioritario" y que no permitirán "que prejuicios de religión, nacionalidad, raza, partido político o nivel social se interpongan entre su deber y su conciencia". Pero añade: "Guardaré el máximo respeto a la vida y dignidad humanas. No practicaré, colaboraré, ni participaré en acto o maniobra alguna que afecte los dictados de mi conciencia". Por ello, pueden argumentar "razones de conciencia" y negarse a atender a un secuestrador. (DyN)