El Lole, asombrado por la presión mediática

El reutemismo y el obeidismo, las dos líneas que dominan el justicialismo provincial, habrían logrado más de un punto de acuerdo para impedir que el debate inaugural en Diputados se transforme en una riña de gallos.

Uno de ellos sería mantener la obligatoriedad de participación de partidos políticos y ciudadanos, aspecto que cuestionan desde el socialismo y el radicalismo.

Reutemann -dicen- sobrelleva incómodo lo que está pasando. Entiende que algunos medios de Rosario y Santa Fe instalaron que la ley de lemas es sinónimo de fraude. Y que en el interior de la provincia el tema no preocupa y nadie siente que le cambiaron el voto. Aquella frase suya todavía calzaría en el pensamiento: "Nadie se levanta pensando en la ley de lemas".

"Yo dije que (la ley de lemas) era un proceso acabado; ahora no quiero interferir", les dijo hace diez días a sus laderos. "El radicalismo dijo que entorpezco la discusión y miren a los legisladores nuestros, decidiendo ellos solitos", explicó.

"Sí, Lole, pero a cambio de planes de vivienda, pavimento y obras que les va a pagar Obeid en sus territorios", le susurraron.

"No lo creo, no podría ser prenda. ¿Vos ves a un político arriesgando el poder por dos cuadras de pavimento?".

"Hay mucha presión mediática y es entendible, los nuestros la padecen. La última semana de campaña yo rastrillaba las radios y era terrible. Creía que en Rosario Binner sacaba el 60 por ciento y nos pasaba por arriba. Me cagué todo. Todavía hoy no entiendo cómo tuvo el 40 por ciento".

"Lo único que saqué en limpio estos días es que los nuestros creen que sin ley de lemas el radicalismo y el socialismo van a ir separados a las elecciones. ¿Puede ser eso?", preguntó.

No obtuvo respuesta.