Chivo expiatorio, se busca

La Justicia de San Isidro investiga una maniobra para involucrar a un vecino del country

Norberto Casanello

Los abogados deben ceñirse a un código de ética. Pero además, existen otros preceptos no escritos cuyo cumplimiento queda en la órbita de sus conciencias. Los hombres de ley dicen que no sería tan objetable defender a un culpable sabiendo que lo es. Pero acusar a sabiendas a un inocente para desincriminar a su cliente no está bien visto en los ámbitos profesionales.

Precisamente, en la Justicia de San Isidro se está investigando si realmente ocurrió un hecho de esa naturaleza en torno al caso García Belsunce. José Liscinio Scelzi -abogado de Carlos Carrascosa, marido de María Marta y principal sospechoso de su asesinato- está imputado en una causa penal por una confusa maniobra que se habría intentado realizar para endosarle el crimen a Nicolás Pachelo, un ex vecino del country. La causa tramita en la fiscalía 5 de San Isidro y está en manos del juez de garantías Diego Martínez.

En febrero de 2003, un efectivo de la Policía de Investigaciones de Pilar, le ofreció al autor de esta nota una paga de dinero para "colaborar" en un informe sobre Pachelo, debido que aquél, por su profesión, conocía detalles sobre sus actividades.

La propuesta sonó extraña. Pese a eso, ante una pregunta, el efectivo policial dijo que "el dinero lo pone la defensa". Nuevamente interrogado, aseguró que era el propio Scelzi quien asumiría el pago. Durante el inusual ofrecimiento, el policía no se percató que estaba hablando en presencia de un testigo.

Tras ese diálogo, este cronista le preguntó al fiscal Diego Molina Pico si era común que se realizaran investigaciones policiales a espaldas de la fiscalía, mediante periodistas, remuneradas por abogados particulares y por intermedio de un organismo de seguridad.

Tras responder negativamente, Molina Pico radicó en ese mismo instante la correspondiente denuncia penal, que recayó en su colega Andrés Martín Mateo. Luego de casi un año de investigación, Scelzi pidió su sobreseimiento, pero el juez Martínez se lo denegó. Así, apeló a la Cámara, que también le falló en contra.

Más adelante, Mateo decidió archivar el caso ante las dificultades para producir la prueba. Pero el fiscal general de San Isidro, Julio Novo, resolvió que la causa debe seguir adelante y nombró al fiscal Germán Saint Martin para que continúe con el caso.

De esta manera, todo indicaría que el abogado de Carlos Carrascosa podría ser sometido a juicio por esa supuesta "compra de pruebas" contra Pachelo.

Como en esta causa ocurren cosas inimaginables, Pachelo se encuentra preso por nueve hechos de hurto presuntamente cometidos en casas de sus amigos en la Capital Federal.

Esa circunstancia daría cierto vigor a la teoría de los abogados de Carrascosa para insistir en que el crimen de María Marta fue perpetrado por alguien que entró en su residencia con fines de robo. Pero en la fiscalía se preguntan: ¿Entonces, por qué lo encubrieron?