| miércoles, 14 de julio de 2004 | Caldeada reunión entre camioneros y una cerealera Los transportistas pedían anoche que se cumpla con un decreto provincial sobre el reparto de las cargas Carlos Walter Barbarich / La Capital María Teresa.- El conflicto desatado entre camioneros de esta localidad con las autoridades de Aceitera General Deheza (AGD) entraba anoche en un cono de sombras. Mientras resultaban infructuosos los pedidos de conciliación planteados por el subsecretario de Transporte de la provincia, Miguel Angel Latorre, los transportistas agremiados en Transportadores Rurales Argentinos (TRA) no descartaban retomar con los piquetes frente de la cerealera.
Al cierre de esta edición se realizaban intensas negociaciones en las que no faltaron cruces de acusaciones y algunos insultos. El disparador del conflicto fue la falta de equidad en el reparto de las cargas que estableció la empresa.
En esta localidad hay más de cien camiones, de los cuales la mitad trabaja en forma particular con AGD mientras que el resto lo hacen en el sindicato de TRA.
Estos últimos denunciaron que, a pesar de un decreto firmado por el gobernador Jorge Obeid la empresa no está cumpliendo con lo dictaminado. La semana pasada se realizó un piquete que duró más de 48 horas y que se levantó transitoriamente hasta anoche para permitir la realización de la reunión, que se en un clima de aspereza.
Acusación Los nucleados en delegación de TRA en María Teresa aducen que el resto de los camioneros del pueblo se llevan toda la carga. El titular de TRA, Carlos Di Nunzio, acusó directamente al subsecretario Latorre de no cumplir con la palabra empeñada y de trabajar para los intereses del empresariado de AGD.
"Es un incoherente porque no defiende los intereses de los camioneros y sí a los de la empresa", se quejó Di Nunzio.
Lo fría noche de María Teresa amenazaba con convertirse en un hervidero cuando la actitud desafiante de los camioneros obligó a las fuerzas policiales a tomar recaudos necesarios para mantener el orden, habiéndose solicitado garantías para que los representantes de AGD que se presentaron en la Comuna local para zanjar diferencias con los camioneros se pudieran retirar del lugar sin inconvenientes.
En un tramo de las conversaciones -que se desarrollaban dentro del edificio comunal- un grupo de transportistas comenzó a hacer sonar sus bocinas, arrojar decenas de bombas de estruendo y bloquear los lugares de salida del local.
En las tratativas estuvieron presentes, además de Latorre, el senador por el departamento General López, Ricardo Spinozzi; autoridades de AGD; la presidenta comunal, María Cristina Gómez, y el secretario de TRA, Carlos Di Nunzio y su vice, Ovidio Rodríguez.
Del contenido del reclamo de los transportadores resultó curioso que en esta oportunidad no era por mejoras en las tarifas de acarreo, una situación que suele ser moneda corriente en estos meses de intenso trabajo.
Pero el aspecto más llamativo aún es que el conflicto no sólo se desató con la cerealera sino también con el resto de sus colegas camioneros que realizan sus actividades en esta localidad.
Incumplimiento El decreto provincial suscripto por Obeid establece que las cargas deberían ser equitativas en momentos en que la cosecha haya terminado. Sin embargo los camioneros nucleados en TRA sostienen que ese decreto no se cumplió en esta ocasión.
"Lo único que hacemos es ver cómo viajan otros camiones mientras nuestras familias pasan hambre", afirmó uno de los camioneros.
Otro transportista relató que el estado de ánimo en general es de decepción y bronca. "Si no se llega a un arreglo con AGD va arder Troya, y no vamos a parar hasta que cumplan con lo prometido por el gobierno provincial y que no es ni más ni menos que el cumplimiento del decreto". enviar nota por e-mail | | |