| miércoles, 14 de julio de 2004 | Irak: muere el gobernador de Mosul tras atentado suicida El gobernador de la norteña ciudad iraquí de Mosul, Usama Kashmula, fue asesinado hoy junto a dos de sus custodios, después de que al menos 10 personas murieran y otras 40 resultaran heridas en un atentado suicida cometido en el centro de Bagdad, informaron fuentes gubernamentales.
Hazem al Galawi, jefe de la oficina de gobernador en Mosul, dijo que Kashmola y dos guardaespaldas murieron cuando los atacantes lanzaron una granada y dispararon contra su vehículo en un camino entre Bagdad y Mosul.
El ataque fue perpetrado a unos 100 kilómetros de esa norteña ciudad, la tercera más grande de Irak.
En tanto, un atentado suicida con coche bomba cerca de la custodiada "zona verde" en el centro de Bagdad provocó la muerte de al menos 10 iraquíes y heridas a otros 40, informó el primer ministro interino de Iraq, Iyad Allawi.
"Es una flagrante agresión contra el pueblo iraquí. Llevaremos los criminales a la justicia", dijo Allawi, quien señaló que el ataque fue en respuesta al reciente arresto de "criminales prominentes".
El atentado ocurrió cerca de la embajada británica y de la superprotegida sede del gobierno interino iraquí en Bagdad, en el peor ataque en la capital desde que Estados Unidos tranfirió el poder al nuevo ejecutivo de Irak, el 28 de junio pasado.
La explosión sacudió varios edificios de una zona céntrica de Bagdad, donde un terrorista suicida a bordo de vehículo cargado con al menos 450 kilos de explosivos se inmoló cerca de un puesto de control, dijeron fuentes militares estadounidenses.
La bomba mató a cuatro guardias nacionales iraquíes y a siete civiles, dijeron las fuentes. Muchos de los civiles hacían cola en el puesto de control para tratar de obtener alguno de los empleos ofrecidos en el gobierno y las fuerzas de seguridad iraquíes.
Otras 40 personas resultaron heridas, entre ellos un soldado estadounidense, dijo el coronel norteamericano Mike Murray.
"Esta es una brutal agresión contra el pueblo iraquí. LLevaremos a estos criminales ante la Justicia", dijo el primer ministro interino iraquí, Iyad Allawi, mientras visitaba el lugar del ataque.
Allawi dijo que el atentado fue en represalia por la decisión del gobierno de arrestar a presuntos extremistas. Las autoridades iraquíes dijeron haber arrestado ayer a más de 500 sospechosos en una gran redada en Bagdad.
El ataque de hoy coincidió con un feriado nacional por el 46 aniversario del sangriento golpe de Estado en que murió el último rey de Irak, Faisal II.
En tanto, al menos tres guerrilleros murieron y otras diez personas resultaron heridas durante un enfrentamiento ocurrido hoy entre soldados estadounidenses y rebeldes en la ciudad de Ramadi, noroeste de Bagdad.
El comando norteamericano en Bagdad no difundió hasta el momento ningún comunicado sobre el incidente.
Por otra parte, el gobierno de Filipinas comenzó a retirar sus tropas de Iraq para satisfacer las demandas de los secuestradores de un filipino, que amenazan con ejecutarlo si el pequeño contingente de unos 50 hombres de ese país no se repliega antes del 20 de julio.
En el atentado cerca del sector de la capital iraquí que concentra sedes del gobierno, la sede de las fuerzas de ocupación encabezadas por Estados Unidos, y embajadas, también resultó herido un soldado estadounidense.
Por otra parte, la policía iraquí anunció hoy que capturó en la ciudad santa de Nayaf, sur del país, a una "banda terrorista" acusada del atentado de 29 de agosto de 2003 en el que fue asesinado el ayatollah Mohammed Baker al Hakim, jefe del Supremo Consejo de la Revolución Islámica en Irak.
El ayatollah, guía espiritual de los chiitas iraquíes, murió junto a un centenar de fieles durante la explosión de un coche bomba estacionado frente a la principal mezquita de Nayaf.
"El grupo que hemos arrestado es culpable también de otros crímenes", dijo un vocero de la policía. (Télam-SNI) enviar nota por e-mail | | |