Federación Agraria reclama la regulación de los alquileres

Más de 2.500 productores participaron del congreso nacional y latinoamericano sobre el uso de la tierra

La Federación Agraria Argentina lanzó una fuerte ofensiva para reclamar la regulación del mercado de alquileres, limitar la venta de campos a sociedades extranjeras y crear un instituto de colonización que priorice el acceso a la tierra de los pequeños y medianos productores agropecuarios.

El reclamo fue respaldado por más de 2.500 agricultores de todo el país que, al cierre de esta edición (jueves), participaban del congreso nacional y latinoamericano sobre uso y tenencia de la tierra organizado por la entidad heredera del Grito de Alcorta, en Parque Norte. "Era el congreso que nos debíamos y con el cual retomamos la causa fundacional de la Federación Agraria", señaló Eduardo Buzzi, quien rescató que la concurrencia masiva al encuentro demuestra que "la cuestión de la tierra en Argentina es una problemática permanente más allá de un pasajero boom de precios".

De hecho, la entidad con sede en Rosario exhibió una capacidad de movilización pocas veces vista en el sector cuando no se trata de eventos que refieren a temas de agronegocios o específicamente productivos.

Al presidir el acto de apertura, del que participaron funcionarios nacionales, legisladores y dirigentes agropecuarios de Brasil, Uruguay, Paraguay, Colombia y México, Buzzi recordó que "hace 40 años que no se organizaba un congreso para discutir este tema en Argentina" a pesar de que desde fines de los 60 "el país asiste a una verdadera contrarreforma agraria".

El documento base elaborado por la entidad para el congreso enfatizó que los viejos arrendatarios que protagonizaron el Grito de Alcorta tardaron 40 años en empujar una estructura legislativa que permitiera que 95 mil productores se convirtieran en propietarios, mientras que "en lo que va del censo agropecuario de 1988 al de 2002 desaparecieron 100 mil productores".

La diversidad geográfica de los asistentes al encuentro, una dinámica que viene acompañando la gestión de Eduardo Buzzi a través de la incorporación a la entidad de productores minifundistas de provincias extrapampeanas y organizaciones aborígenes, llenó de matices la discusión que se dio en Parque Norte.

Así, en distintas comisiones de trabajo, precedidas de los informes elaborados en los foros regionales preparatorios del congreso, se abordó desde las dificultades de acceso y titularización de la tierra de miles de pequeños productores que ocupan en forma precaria unas 7,7 millones de hectáreas en todo el país; la presión que sufren miles de campesinos de zonas marginales por parte de grandes grupos económicos que desembarcan con planteos de alta productividad en provincias del NOA y el NEA, y la competencia por la tierra instalada en la región pampeana entre medianos productores y sociedad de inversión o pooles de siembra, que se expresa en el precio de los arrendamientos.

En este tema, la Federación Agraria Argentina abrió la discusión para regular el mercado de alquileres a través de reformas a la ley actual. Aldo Casella, asesor legal de la entidad, advirtió que el tema es compleja por los cambios que sufrió la figura del arrendatario en los últimos años. "El arrendatario actual no es el mismo de la ley del año 48, que pugnaba por el acceso a la tierra frente a grande terratenientes, hoy hay grandes grupos capitalistas que arriendan miles de hectáreas de campo que también están pidiendo que los contratos se hagan a mas largo plazo y menor precio", señaló.

Según datos brindados por especialistas del Indec que participaron del censo agropecuario de 2002, la superficie agropecuaria trabajada en propiedad cayó 8% respecto del censo 88, mientras que aumentó 33% la superficie trabajada en alquiler.

En ese sentido, se pronunció a favor de un proyecto de ley que incluya una figura específica de pyme agropecuaria o agricultor familiar, que sea objeto de protección específica y tenga privilegios, por ejemplo, a la hora de renovar alquileres.

"Hoy es sabido que el incremento de los alquileres está también impulsado por la llegada de muchos capitales extra sector que buscan blanquearse comprando y arrendando propiedades agropecuarias", señaló Buzzi.

La batería de leyes que impulsa la Federación para conseguir el objetivo de "poblar el campo con un millón de chacras", incluye el proyecto para limitar la tenencia de tierra por parte de sociedades extranjeras (que en varias ocasiones estuvo a punto de perder estado parlamentario) y la creación de un instituto de colonización que cumpla un rol similar al que existe en Uruguay.

El último congreso organizado para abordar la cuestión de la tierra se había realizado en el año 67 en Santa Fe.