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 miércoles, 30 de junio de 2004

ZONA SUR
Un ratito en el súper por 4 mil pesos
Dos ladrones armados llegaron minutos antes que el custodio, ordenaron tirarse a todos al suelo y robaron

Dos delincuentes asaltaron ayer a la mañana un supermercado en zona sur y, sin agredir a los siete empleados que se encontraban en el lugar, se alzaron con alrededor de 4 mil pesos. El negocio cuenta habitualmente con custodia, pero ayer los hampones se anticiparon: llegaron diez minutos antes que el vigilador para dar el golpe.

Ocurrió minutos después de las 8 en el súper Apolo, de Lamadrid y Cucha Cucha. Los empleados y dueños recién habían llegado y las puertas ya estaban abiertas al público. "Gracias a Dios no había nadie todavía, sino no sé qué habría pasado", comentó a La Capital uno de los trabajadores que prefirió preservar su nombre.

La acción transcurrió en pocos minutos y los autores del atraco demostraron tener a raya sus nervios. Primero uno encañonó a una de las cajeras y el otro fue hacia la parte trasera, donde estaba la mayoría de los empleados. Según fuentes policiales, los maleantes recolectaron entre 3 y 4 mil pesos y huyeron a pie.

Uno de los empleados sostuvo que el ladrón que fue hacia el interior del local se movió con total seguridad. "Apareció caminando con uno de los muchachos encañonado. Llegó hasta el sector de la carnicería y nos dijo a todos: tírense boca abajo, tranquilos que no pasa nada. Nos apuntaba con su arma, pero todo fue tan rápido que el tipo pasó por acá como si estuviera mirando las góndolas", comento el trabajador.

"Todos nos quedamos tirados en el piso hasta que los vimos salir. Cerraron la puerta del frente y se fueron como si nada. Estaban tan tranquilos que ni siquiera se tomaron el trabajo de atarnos", sostuvo el muchacho. Distintas fuentes contaron a este diario que Apolo suele tener vigilancia privada y que ese servicio es prestado por un policía provincial en sus ratos libres.

El vigilador todavía no había llegado cuando los maleantes irrumpieron. Los voceros no descartaban que los bandidos hubiesen contado con buena información de antemano. En ese sentido trascendió que el dinero que se llevaron estaba destinado al pago de proveedores, que en general se realiza en horario matutino y al contado.

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El local está en Lamadrid y Cucha Cucha.

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