| miércoles, 30 de junio de 2004 | Un equipo que unió a Colombia Un trabajo denodado y un plantel de jugadores criollos que con humildad y temperamento han sabido afrontar los desafíos fueron las bases de este Once Caldas que puede llegar a convertirse en campeón de la Copa Libertadores, algo por lo que sólo apostaban unos pocos hinchas de Manizales.
El gran empate conseguido en el partido de ida en la Bombonera prendió la chispa e inició la fiesta que todos en Manizales dicen que continuará hasta el juego de la Intercontinental en Tokio.
Al igual que Argentinos Juniors, Flamengo, Racing, Vasco da Gama y Vélez, el conjunto albo se podría convertir mañana en el sexto equipo que llegando por primera vez a la final conquista el título del mejor club continental.
Hasta hace poco, Caldas era un equipo de mitad de tabla que revirtió sus esquemas e incorporó una camada de jugadores de las inferiores que con hambre llegaron a la escuadra profesional con ansias de lucirse para alcanzar un contrato que los vinculara definitivamente con el club.
Abrazados al estandarte de su equipo permanecen los cientos de seguidores del Caldas que acabaron en una hora las entradas para asistir al estadio Palogrande y ver a su equipo alzarse con la segunda Libertadores para Colombia, después de 15 años de sequía.
Los diarios y revistas a nivel nacional no han escatimado elogios para los jugadores y el técnico, Luis Fernando Montoya. Atrás quedó el bombonerazo y llega Palogrande, la fortaleza inexpugnable de Once Caldas, donde el conjunto colombiano no conoce la derrota y aspira a celebrar mañana venciendo a los xeneizes.
El estratega cafetero ya anunció que su disposición táctica en Manizales será diferente a la expuesta en Buenos Aires, donde apeló a un juego ultradefensivo para sacar un 0-0 que lo tiene a las puertas de conquistar el campeonato.
Los nombres de Arnulfo Valentierra, Elkin Soto, Juan Carlos Henao se robaron los aplausos del público que hasta hace poco sólo los conocía discretamente y que ahora los cataloga como los héroes y artífices de la conquista.
Los colombianos han cobijado al pequeño club de mitad de tabla y las apuestas en todo el país se inclinan por un triunfo sobre Boca. Incluso el presidente colombiano, Alvaro Uribe, hincha de Nacional de Medellín, visitó la concentración de los albos para animarlos y felicitarlos por el logro.
Once Caldas logró con su excelente participación en la Libertadores no sólo llegar a la primera final en un torneo internacional en su historia, sino unir a la mayor parte de los colombianos, que quiere ver al equipo chico derrotando la jerarquía de Boca Juniors. enviar nota por e-mail | | |