Los valores, ¿dónde están?

Hace poco más de cien años en nuestro país hubo ciertos personajes con una alta convicción y grandes valores que hicieron mucho por nosotros, entre los que se destacó Manuel Belgrano. Tanto éste como otros tenían una visión moral y ética intachable, con valores como la justicia, la igualdad, la verdad y la franqueza, no como meros discursos políticos de los cuales estamos cansados de escuchar sino convencidos de sus ideas y acciones. Belgrano enarboló las importantísimas banderas de la honestidad, la coherencia y la humildad, cumpliendo fielmente sus valores, que lo hicieron ser una persona, un funcionario y un patriota intachable e irreprochable. Hoy si bien todavía hay muchos argentinos patriotas bien intencionados que se levantan a las cuatro de la mañana a buscar trabajo y que siguen siendo honestos a pesar de las tentaciones, cuesta mucho encontrar valores belgranianos en la función pública. En ella vemos cotidianamente una desmedida corrupción, hipocresía, injusticia y una terrible desigualdad y un gran desinterés en cuanto a la educación del pueblo. Una de las grandes ideas sostenidas por Belgrano es que "sin educación nunca seremos más de lo que desgraciadamente somos".

Marcela Marta Cinalli