| miércoles, 23 de junio de 2004 | Medicina policial Una denuncia de acoso y ahora de intimidación Una médica de la policía provincial denunció un robo el domingo pasado al cual relaciona con una serie de medidas en su contra y sucesos extraños ocurridos, según alega, tras la acusación de acoso sexual y psicológico que formuló en forma pública contra un comisario de la Unidad Regional II. El policía se desempeña junto con ella en la dirección de Medicina Legal, ubicada en Dorrego 960. Un día después de la denuncia pública, efectuada un mes atrás, las autoridades policiales resolvieron disolver el centro médico de la Jefatura de policía del cual la doctora era jefa.
Medicina Legal fue centro de denuncias cruzadas los últimos meses. Algunas objetaron la labor de lo mismos profesionales de la repartición, lo cual revela la existencia de una interna escandalosa que late dentro de esa sección.
La médica denunciante es Silvana Roldán, una oficial ayudante que ingresó hace tres años a Medicina Legal y llevó adelante el programa de atención de detenidos en las cárceles. La doctora acusó en forma pública al subjefe de Medicina Legal por haberla acosado sexual y sicológicamente durante los tres años, casi desde su ingreso al sector.
Este comisario, a la vez, denunció a Roldán en abril pasado por "fisgonear" en el libro de novedades de las comisarías. La médica se defendió diciendo que para cumplir con sus tareas -la atención de detenidos en seccionales- debía controlar esos libros, en lo que fue respaldada por el jefe de Medicina Legal, Jorge Velasco.
En respuesta a esa acusación, Roldán señaló a través de una nota que la reacción del comisario se debía a "reiteradas invitaciones a intimar" que ella había rechazado. Esa acusación fue tomada en cuenta por las autoridades de Asuntos Internos, aunque hasta el momento no se tomó ninguna medida, según indicó la médica.
Medidas sugestivas La abogada de Roldán, Susana Treviño, señaló a La Capital que "sugestivamente" después de la denuncia pública, a su cliente "le retiraron algunas funciones y le quitaron personal". Y señaló que el robo que sufrió el domingo pasado tiene características llamativas.
Treviño contó que el robo ocurrió cuando la médica salió de su casa a buscar la ambulancia después de recibir esa orden por un llamado telefónico. Detalló que iba en su auto particular y fue detenida por dos jóvenes que se llevaron un bolso con documentación "sobre los trabajos que estaba haciendo en la policía y en su consultorio particular". Remarcó que los ladrones no tocaron "una cámara fotográfica, una de escribir, un par de botas de cuero que llevaba para arreglar, ni el maletín con los instrumentos médicos que los ladrones habitualmente valoran".
La abogada adelantó que en los próximos días va a presentar una acusación formal "pero no por acoso sexual, ya que ese delito no está tipificado acá".
Las denuncias cruzadas involucraron al jefe de Medicina Legal, Jorge Velasco, procesado en abril pasado por amenazas coactivas en perjuicio de otro médico policial, Ricardo Coloccini. La causa -en la que, como en el robo, actúa Luis María Caterina- surgió en noviembre de 2002 cuando, según la denuncia, Velasco le habría exigido a su colega alterar un informe sobre un accidente de tránsito que lo tenía como imputado. enviar nota por e-mail | | |