| domingo, 20 de junio de 2004 | Letra chica Las abejas no son tan trabajadoras El neurobiólogo y zoólogo alemán Randolf Menzel, que lleva 40 años estudiando a las abejas -conoce la forma de su cerebro, su fisiología visual y hasta cómo vuelan-, acaba de revelar que a pesar de su fama estos insectos son perezosos, nada aplicados y poco laboriosos.
Premiado por la Sociedad Alemana de Zoología por un trabajo de investigación sobre estos insectos, el científico declaró que "las abejas en realidad no son para nada trabajadoras. Duermen mucho y más bien son holgazanas".
Menzel, que trabaja como profesor en la Universidad libre de Berlín, está dedicado a revisar el comportamiento de las abejas y su neurobiología, que comprende la percepción olfativa y visual a través del cerebro y a nivel celular, así como sus métodos de aprendizaje y memorización.
"Por la noche, el 80 por ciento del tiempo las abejas lo pasan durmiendo y en el día vuelan muy a menudo a los panales, donde descansan las alas por mucho tiempo", señaló el científico.
Sin embargo, Menzel descubrió que "las abejas aprenden muy rápido -y con seguridad- a reconocer los diferentes aromas de las flores y tienen cinco fases de memoria".
El científico constató que, en el aprendizaje, las abejas siguen el mismo patrón de conducta de otros animales, e incluso del ser humano, que aprende cuando se les recompensa por hacerlo."Si la abeja es premiada una vez por un comportamiento, el hecho lo recuerda una semana. Si es recompensada tres veces por lo mismo, no se olvidará de ello durante toda su vida", indicó.
Con su extraordinaria memoria, destacó Menzel, las abejas diferencian muchas tonalidades de colores y perfumes. enviar nota por e-mail | | |