Protesta social. Marchas, bloqueo de boleterías, cortes de calles y escraches

McDonald's denunció "extorsiones" de los piqueteros que ocuparon sus locales

Los activistas ocuparon numerosos locales de la cadena de hamburguesas durante más de tres horas

Piqueteros enrolados en el Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados (Mijd) ocuparon ayer durante más de tres horas una cantidad indeterminada de locales de la cadena de hamburguesas McDonald's y se retiraron luego de anunciar un compromiso de la empresa de recibir a una delegación de dirigentes la semana próxima. Sin embargo, McDonald's negó "en forma terminante" haber asumido "cualquier obligación" con el grupo responsable de la toma y aseguró que "no puede acceder a este tipo de extorsiones".

La empresa responsable de McDonald's aseguró haber "sido víctima de la toma de nueve locales céntricos en la ciudad de Buenos Aires", mientras los piqueteros sostuvieron haber ocupado "centenares" de sucursales en la Capital Federal y el conurbano.

Los piqueteros le reclamaron a la compañía una donación de 10 mil libros y 20 mil litros de leche para escuelas y comedores comunitarios. No obstante, la empresa aseguró que "los piqueteros presentaron de forma extorsiva y por primera vez un petitorio de imposible cumplimiento con una actitud que buscó amedrentar a los empleados".

Además, sostuvo que "en forma preventiva, interrumpió sus ventas y privilegió la seguridad personal de sus empleados y clientes. La empresa no puede acceder a este tipo de extorsiones y ratifica, tal como lo ha venido haciendo durante casi 20 años su programa de responsabilidad social corporativa".

Sin embargo, al término de la ocupación, los piqueteros aseguraron que la empresa se había comprometido a recibir a una delegación de dirigentes en la próxima semana, aunque la compañía negó terminantemente cualquier compromiso y consideró que, de aceptar una negociación, "estaría convalidando el camino de la extorsión y la violencia".

La toma de esos locales fue el episodio saliente de una jornada en que piqueteros de distintas corrientes concluyeron la Semana Federal de Lucha en demanda de aumentos salariales, planes sociales y rebajas de tarifas con una serie de movilizaciones y acciones de protesta que convergieron en una masiva concentración en la Plaza de Mayo.

A lo largo de todo el día, desde la mañana, los piqueteros bloquearon las boleterías de la estación de trenes de Constitución, realizaron cortes de calles, escraches y ocupación pacífica de locales comerciales y se movilizaron hacia el centro porteño y la Plaza de Mayo.

Asimismo, como efecto secundario de las protestas sociales y del dispositivo de seguridad desplegado por la policía se produjo un descomunal y previsible congestionamiento en el tránsito de todo el macro y microcentro porteño.

Los manifestantes demandaron aumentos salariales, reducción de tarifas, incrementos en planes laborales y acortamiento de la jornada de trabajo para generar más puestos de empleo.

Por un lado, la Corriente Clasista y Combativa (CCC), que lideran Amancay Ardura y Juan Carlos Alderete, arrancó con su protesta en la Plaza Congreso y, después de avanzar por la avenida de Mayo, llegó frente a la Casa de Gobierno, donde hizo un acto de cierre pasadas las 15.


A la hora señalada
En la misma vereda, el Bloque Piquetero Nacional, integrado por los representantes piqueteros de partidos de izquierda, se concentró en las inmediaciones del Parque Rivadavia, en el barrio porteño de Caballito, y de allí partió la caravana hacia Plaza de Mayo, donde, a las 18, dio por terminada la manifestación.

"No queremos que se pague la deuda externa con el hambre, la marcha es testimonio de ese reclamo popular", expresó Néstor Pitrola, que encabezó la columna del Polo Obrero desde Caballito hasta el centro porteño.

Sin un acto formal de cierre, en la Plaza de Mayo la agrupación de Pitrola leyó un documento en el que se defendieron las "reivindicaciones genuinas de los trabajadores" y se rindió homenaje a los mineros muertos en los túneles de Río Turbio.

La gente de Castells en un McDonald's.