| sábado, 19 de junio de 2004 | Ganadería. Fuerte presencia oficial en el congreso mundial de la carne Argentina promete llevar la trazabilidad a todo el rodeo Ahora rige para la exportación a Europa. Se debería identificar a unas 56 millones de cabezas de ganado Toda la carne al asador. La delegación argentina aprovechó el 15º congreso mundial de la carne que se realiza en la ciudad canadiense de Winnipeg para reclamar el fin de las restricciones comerciales por la aftosa. Además, en una jugada audaz, el subsecretario de Agricultura, Claudio Sabsay, anunció que a partir de marzo se generalizará la identificación individual del ganado, que hoy sólo rige para los animales con destino de exportación a la Unión Europea.
La apuesta tiene su razón de ser en el nuevo escenario internacional para el negocio de las carnes, que con la crisis de producción provocada por los problemas sanitarios en Estados Unidos y Canadá, y perspectivas de precios firmes, ofrece una renovada oportunidad para las carnes argentinas.
El comisario de Agricultura de la Unión Europea, Franz Fischler, pronosticó que en los próximos 5 años el precio de la carne vacuna subirá un 9% en Europa, lo que arrastrará un incremento del valor del producto a nivel internacional.
"Con la nueva política agropecuaria europea que privilegia la calidad por encima del número de cabezas de ganado, sólo prevemos un leve aumento de la producción, en cambio habrá varios millones de habitantes que se sumarán al consumo", dijo el funcionario en alusión a los países de la Europa del Este, recientemente integrados al bloque. Paralelamente, un informe de la FAO señaló que la producción mundial de carne, como consecuencia de distintas crisis sanitarias y el aumento del costo de los alimentos, aumentará a una tasa muy baja, desde 250,4 millones de toneladas en 2003 a 253,6 millones en 2004.
En cambio, las exportaciones de carne de Sudamérica, que aumentaron en los últimos tres años, se incrementarían en 6% en 2004, elevando la cuota de venta de carne de la región a 27%, por encima del 16% de comienzos de 1990.
En este contexto, el secretario de Agricultura, Miguel Campos, consideró como un "castigo inmerecido" las restricciones que se aplican desde hace 60 años por la aftosa a las carnes argentinas.
"Muchos países utilizan las diferencias de status sanitarios sin medir el riesgo existente en las enfermedades, para impedir el ingreso de productos cárnicos".
Durante el encuentro que el titular de la Sagpya mantuvo con Bob Speller, ministro de Agricultura y Agroalimentación de Canadá, a quien solicitó la formación de una comisión conjunta, con Estados Unidos y México, que en setiembre próximo visitará el país para inspeccionar establecimientos y plantas de faena con vistas a la reapertura del mercado del norte a las carnes argentinas.
El subsecretario de Agricultura, Claudio Sabsay, aprovechó el congreso para hacer una apuesta de riesgo. "En las últimas semanas, hemos decidido que para marzo de 2005 toda la ganadería nacional, es decir 56 millones de cabezas, se encuentre comprendida en un sistema de identificación individual".
El subsecretario puntualizó que Argentina es el quinto productor y el sexto exportador mundial de carne bovina y que "la situación del mercado internacional, caracterizado por la falta de oferta y firmeza de los precios, constituye una buena oportunidad" para aumentar la participación del país.
El funcionario describió la medida como parte de una política destinada a "terminar con el doble standard" entre mercado interno-externo, lograr mayor "transparencia y eficacia en el sistema de control sanitario" y construir un "modelo altamente competitivo" que permita "capturar los máximos precios" internacionales para apuntalar el "crecimiento de toda la cadena" de la carne del país.
La propuesta de identificar individualmente a 56 millones de cabezas, un número considerable aún para los grandes países ganaderos, fue tomada con prudencia por los empresarios presentes. Ignacio Gómez Alzaga, titular del Mercado de Hacienda de Liniers, se mostró sorprendido por el anuncio y estimó que por "las características de la ganadería argentina que, mas allá del área central del país, se desarrolla en zonas de difícil acceso, será una medida difícil de aplicar".
Aftosa paraarancelaria A su turno, en coincidencia con la posición argentina en materia de fiebre aftosa, el presidente de la Comisión del Código de Sanidad Animal de la OIE, Alejandro Thiermann, dijo que debían considerarse en un pie de igualdad a los países que, con o sin vacunación, están libres de la enfermedad pues la erradicación definitiva no es una categoría científica "recomendada por los códigos internacionales".
Asimismo, Thiermann recomendó "cortar la paranoia" con respecto a la "vaca loca" que "es un problema sanitario más", no el único "ni el último" y consideró probable que en algunos años "estemos hablando de otra grave enfermedad".
En un aparte del congreso, el secretario Campos se reunió con el comisario de Agricultura europeo, Franz Fischler, para analizar la marcha de las negociaciones entre el Mercosur y la UE para alcanzar un acuerdo comercial, que podría derivar en un aumento de las cuotas de exportación al viejo continente. enviar nota por e-mail | | |