Cristian Ramaro dice que sus captores lo trataron bien pero no los puede reconocer

Buenos Aires.- Cristian Ramaro, el joven secuestrado hace ocho días y liberado ayer luego del pago de dos rescates, ratificó hoy que sus captores lo trataron "bien" aunque señaló que no los puede reconocer, ya que permaneció todo el tiempo vendado.

Cristian dijo que, durante su cautiverio sólo mantuvo contacto con uno de los secuestradores, y que apenas escuchaba a "dos o tres más que hablaban" en la vivienda donde lo mantuvieron encerrado.

Incluso, en declaraciones realizadas esta mañana desde su casa en el partido de Tigre, el joven dijo "agradecer" que sus captores no lo hayan "maltratado" durante su cautiverio y dijo: "Yo no soy quien para juzgar a nadie, para eso está Dios".

Ramaro, además, contó que estuvo "vendado y atado todos los días" y que, en el momento del secuestro "me metieron en un auto, me encapucharon y nada más" cuando estaba en la puerta de su casa y se dirigía "a la facultad".

"No vi nada y no reconozco a nadie, estuve continuamente vendado", afirmó el chico, consultado sobre si podría identificar a sus captores, luego de que desde el gobierno provincial se sostuviera que existen pistas firmes sobre los autores del hecho.

Cristian, quien presentó una marca a la altura del tabique, según explicó, por el tiempo que llevó puesta la venda sobre sus ojos, indicó que "sabía que había medios y todo" siguiendo su caso, "pero no supe de tanta magnitud hasta que llegue acá", por su casa.

Respecto de sus captores, dijo que "en ningún momento me amenazaron" y que le dijeron "dos veces el día anterior, que me iban a largar, por lo que esperé toda la noche, y al otro día se dio" que fue liberado.

Dijo también que "no estaba nervioso" y que fue soltado "en una calle muy oscura, no podía ver bien por las vendas, caminé un par de cuadras y una gente de una casa fue la que me trajo" hasta su domicilio de Tigre.

Por otra parte, dijo no saber "nada" si hubo una "traición" entre integrantes de la banda, que hizo que se pidiera un segundo rescate por él, y destacó que "lo único que puedo es agradecer que no me hayan maltratado".

También dijo agradecer "las cartas que me llegaron de todos lados, así como la cadena de oraciones" pidiendo su liberación y aconsejó a quienes padezcan su experiencia "que estén tranquilos, no traten de hacer locuras y recen".

(DyN)