| sábado, 29 de mayo de 2004 | Steffi Graf, la vida después del tenis La alemana, casada con Andre Agassi, no extraña la actividad y disfruta de su familia Andreas Bellinger Viviendo en Las Vegas, rodeada de desierto, Steffi Graf echa de menos los bosques de su Alemania natal, "salir a recoger fresas, andar en bicicleta y jugar con los niños en la calle".
En una entrevista con la agencia DPA, la mítica tenista repasó su vida cinco años después de su retiro. No echa de menos la competición ni sigue el circuito, y la mayor parte del tiempo lo dedica a sus dos hijos mientras intenta acompañar a su marido, el tenista Andre Agassi. Cuando el estadounidense se retire, serán "una familia normal", aunque con mucho tiempo libre.
-¿Qué echás de menos de Alemania viviendo en Las Vegas?
-Añoro un poco la naturaleza, el verde. Salir a recoger fresas, andar en bicicleta y jugar con los niños en la calle. Eso no es posible en Las Vegas.
-¿Qué cambió en tu vida al tener dos hijos?
-Con uno solo todavía se podían hacer muchas cosas. Pero tener dos es otra cosa muy distinta. El mayor tiene ahora casi dos años y ocho meses, y tiene energía de sobra y quiere jugar. Así que hay que dividirse las tareas.
-¿Creés que a Andre a veces le gusta estar solo de viaje para poder dormir bien?
-Seguro, el sueño es irrenunciable para los deportistas de alto nivel. Pero después de unos días ya nos echa de menos otra vez. Desgraciadamente, lo de dormir todavía no lo pude disfrutar yo. Desde que el pequeño está con nosotros es imposible ni siquiera pensarlo.
-¿Qué te dice la idea de jugar dobles mixtos?
-Muy poco. Nunca se puede decir "jamás", pero es muy, muy improbable. La idea de jugar con Andre el mixto en Roland Garros salió de una broma, y se tomó en serio. Me gustaría estar de nuevo al lado de Andre, pero no creo que eso ocurra en un torneo del Grand Slam. Llevo un año casi sin jugar, este año jugué un par de veces, y me hice una rotura muscular.
-¿Echás de menos, en alguna forma, el tenis de competición?
-En absoluto. Nunca lo eché de menos y ahora tampoco.
-¿No tenés envidia de Martina Navratilova, que sigue jugando con casi 50 años?
-Para nada, pero me quito el sombrero. Es impresionante lo que hace, pero a mí me gusta más pasar el tiempo con mi familia.
-¿Mantenés el contacto con el circuito internacional?
-Muy poco, voy muy de vez en cuando a las canchas. Y cuando voy lo hago principalmente a los partidos de Andre. Alguna que otra jugadora sí veo, y nos decimos "hola".
-En julio vas a entrar en el Salón de la Fama. ¿Qué significa esta distinción?
-Estrés. No me encuentro aún cómoda con las apariciones públicas de este tipo, con tener que dar un discurso. Pero es por supuesto un honor muy especial. Habrá momentos que disfrute, pero antes me romperé la cabeza y estaré increíblemente nerviosa. Eso me produce simplemente dolor de estómago.
-Junto a tu familia, ¿mantenés algunas ocupaciones profesionales?
-Tengo mi compañía de marketing, una colección de bolsos y algunos socios publicitarios. Pero la mayor parte del tiempo lo dedico a mis hijos.
-Tu marido tiene 34 años, ¿qué pasará cuándo se retire Andre Agassi?
-Mientras Andre esté en forma y la pase bien, seguirá jugando. Y yo lo seguiré apoyando. Después seremos una familia normal, entre comillas. Porque normal sería ir cada día a trabajar, pero nosotros tendremos más tiempo que otras familias. Naturalmente nos alegramos de eso.
-¿Tenés miedo de cuando tu marido esté todo el tiempo en casa?
-No, por Dios, no. Nos gusta estar juntos, y él también estará ocupado. Andre tiene muchos asuntos en Las Vegas, como por ejemplo su fundación. Pero tendrá que elegir, a qué se dedica. Necesitará algún tiempo para decidirse.
-¿Tendrías algo en contra de que Jaden o Jaz compitiesen como deportistas profesionales?
-No. Creo que somos muy sensibles y los apoyaremos en lo que hagan, por lo que tengan preferencia. Y creo que el deporte nunca es algo erróneo. No tiene por qué ser fútbol americano o boxeo.
-Es decir que deben crecer con total normalidad.
-Por supuesto, de hecho le doy mucha importancia a que el mayor pase mucho tiempo con otros niños.
-¿Está ya completa la familia Steffi Graf - Andre Agassi?
-Eso nunca se puede decir por adelantado, pero creo que dos es un número fantástico. Uno sólo tiene dos brazos y dos manos, y somos sólo dos. Yo valoro ver crecer a los niños y poder pasar tiempo con ellos. Lo veo con algunos amigos, cuando se tienen tres se hace todo más difícil. Dos es un buen número. (DPA) enviar nota por e-mail | | Fotos | | Graf hoy es una empresaria exitosa de bajo perfil. | | |