| sábado, 29 de mayo de 2004 | Europa y América latina, distanciadas por Cuba Guadalajara. - La III Cumbre de la Unión Europea y América Latina y Caribe, que se clausuró ayer en la ciudad mexicana de Guadalajara, se declaró "horrorizada" por los malos tratos a prisioneros iraquíes. A la vez, en la declaración final, y en el marco de la confrontación entre Cuba y la UE, se evitó por expreso pedido de los europeos condenar el embargo estadounidense contra la isla. Más allá de estos temas, el mayor rédito de la cumbre fue la delineación de un nuevo eje de poder entre el bloque europeo y el latinoamericano, un total de 58 naciones.
El texto final, que fue objeto de fuertes debates, condena todo tipo de tortura, sin mencionar de manera expresa a Estados Unidos u otros países, y excluye un párrafo que reclamaban Cuba y otras naciones latinoamericanas contra la aplicación de "medidas unilaterales contra terceros países". Cuba exacerbó su enfrentamiento con la Unión Europea, a la que volvió a llamar "aliado y subordinado" de Washington por oponerse a condenar explícitamente el embargo norteamericano. Fidel Castro decidió no asistir a la reunión dando como motivo de su ausencia "la complicidad de la UE con los crímenes de Estados Unidos contra Cuba". La Unión Europea ha condenado la ola represiva desatada en Cuba en marzo de 2003, y desde entonces decidió reducir sus relaciones diplomáticas y planes de colaboración con el país caribeño.
Previamente el deseo compartido de relanzar la alianza europea y latinoamericana marcó los discursos inaugurales de la cumbre, a la que asistieron jefes de Estado y de gobierno y cancilleres de 58 países. América Latina, el Caribe y la UE deben "tener un papel preponderante en la conformación de un nuevo orden internacional, en donde el multilateralismo y la cohesión social se traduzcan en un mundo más seguro, más equilibrado, próspero y justo", aseguró el presidente mexicano Vicente Fox. La nueva Unión Europea de 25 miembros y el subcontinente americano representan un tercio del sistema de Naciones Unidas y ocupan 6 de sus 15 escaños en el Consejo de Seguridad.
Ambas regiones deben "acentuar su asociación estratégica", pidió una de las estrellas de la reunión, el presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, en su primera visita a América Latina.
Las cumbres entre la UE y América Latina y Caribe, que comenzaron en 1999, podrían contar en el futuro con una secretaría general permanente radicada en Madrid, según la propuesta que hizo el presidente de Brasil, Lula da Silva, a Rodríguez Zapatero. El jefe del gobierno español ha aceptado, pero habrá que ver qué dicen los otros", señalaron fuentes del Ejecutivo socialista.
En el encuentro de México estuvieron ausentes, además de Castro, el presidente de Argentina, Néstor Kirchner, el de Perú, Alejandro Toledo, y los primeros ministros de Gran Bretaña e Italia, Tony Blair y Silvio Berlusconi, entre otros. enviar nota por e-mail | | |