| miércoles, 26 de mayo de 2004 | Argentina fue declarada libre del mal de la vaca loca El nuevo status sanitario que otorgó ayer la OIE permitirá abrir nuevos mercados a las carnes argentinas Argentina fue declarada ayer país libre del mal de la vaca loca por la Organización Internacional de Epizootias (OIE), informaron fuentes del Servicio Nacional de Seguridad y Calidad Agroalimentaria (Senasa).
El nuevo status, que significa el máximo nivel de confiabilidad para la carne argentina respecto de esa enfermedad, fue otorgado en la Asamblea Anual de París con el aval unánime de los 170 países miembros de esa organización, agregaron las fuentes.
Aunque en el organismo sanitario prefirieron no hacer estimaciones acerca de las exportaciones que se abrirán a raíz de la declaración, la misma era esperada desde hace meses por los productores ganaderos, los frigoríficos y el gobierno, y significa un fuerte aval al país ante los mercados internacionales.
El presidente del Senasa, Jorge Amaya, que asistió a la asamblea de la OIE en París, destacó que la resolución 21 de esa entidad -que otorga el nuevo status a la carne argentina- "contó con el apoyo de los 170 miembros".
La misma resolución, agregaron las fuentes, declaró también a Uruguay, Islandia y Singapur libres de Encefalopatía Espongiforme Bovina (EEB), nombre científico de la enfermedad.
El director general de la OIE, Bernard Vallat, había anticipado el mes pasado que "sólo cuatro países del mundo, entre ellos la Argentina", serían declarados libres de vaca loca en el congreso que se realizó ayer.
El cambio de status sanitario "favorecerá el crecimiento del comercio mundial de carnes", estimó entonces el especialista, quien juzgó que permitiría abrir a las carnes argentinas mercados hoy cerrados y otorgaría al país el derecho a recurrir ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) en Ginebra, para denunciar a los países que no acepten las nuevas normas.
Para el director general de la OIE, el cambio de la política de la institución surgió a partir del rechazo de la sociedad al sacrificio de millones de animales, como ocurrió con el ganado en Gran Bretaña en 2001 a raíz de la aparición de la vaca loca.
El brote de ese año de vaca loca causó espanto entre los consumidores europeos y derrumbó las ventas, por el carácter letal de la enfermedad para los seres humanos y la dificultad de detectarlo en carnes para consumo masivo.
Por otra parte, Vallat destacó en esa oportunidad en Buenos Aires la "transparencia" con que la Argentina manejó la aparición de un foco de fiebre aftosa en la localidad salteña de Tartagal a fines de agosto del año pasado. enviar nota por e-mail | | |