San Lorenzo se llevó los tres puntos y vuelve a creer

Venció a Banfield y lo pasó en la tabla acumulada, quedando cerca de las copas

San Lorenzo avanzó anoche hacia las próximas copas internacionales gracias a la victoria sobre Banfield en el sur por 1 a 0 y con los tres puntos lo pasó en la tabla anual, en la que, de momento, se ubicó tercero, detrás de Boca Juniors y River Plate. El único gol fue obra de Pablo Zabaleta, a los 39 minutos de la etapa inicial, y el premio para los azulgranas fue por demás justo.

El primer tiempo fue interesante porque San Lorenzo necesitaba la victoria y la buscó con decisión. El equipo de Néstor Gorosito procuró juntar a los creativos Leandro Romagnoli y Walter Montillo y los dos tuvieron un rendimiento importante cuando se movieron por el sector izquierdo.

Además de los armadores, por el lado izquierdo se soltó Jonathan Bottinelli y eso permitió que rotaran los delanteros Damián Luna y Nicolás Guevara, por lo que Banfield soportó dificultades defensivas con frecuencia.

El gol que merecía San Lorenzo se demoró fundamentalmente por la tarea eficaz del juvenil arquero local Mariano Barbosa. El guardavalla banfileño estuvo atento y respondió con convicción y rapidez, con llamativa capacidad para simplificar.

Pero no sólo por eso, ya que también se hizo esperar por la falta de definición que caracteriza a los de Boedo desde que se retiró el experto Alberto Acosta.

La escena del desnivel se apreció a los 39, cuando el Pipi Romagnoli abrió la puerta del fondo por la izquierda y mandó el centro que Zabaleta resolvió con una volea descendente.

Banfield se defendió mal en ese capítulo inicial y respondió poco. La mejor oportunidad para los sureños la generó Rodrigo Palacio, quien tocó sobre la salida de José Ramírez, pero salvó Diego Capria de cabeza muy cerca de la línea decisiva.

La segunda parte fue diferente, porque San Lorenzo optó por otorgarle prioridad al cuidado del resultado y el entrenador de Banfield, Julio Falcioni, recurrió al armador José Luis Sánchez como reemplazante del marcador de punta Juan Quiroga.

Como consecuencia de las variantes, San Lorenzo se volvió conservador y sus respuestas sólo sirvieron cuando intervino Montillo, el futbolista más destacado de la noche.

Un cabezazo potente de Eduardo Bustos Montoya fue desviado por Ramírez con una atajada sobresaliente en la acción más profunda que causó el conjunto vestido de anaranjado.

En definitiva, San Lorenzo se impuso porque tuvo mayor creatividad y jugó mejor tanto cuando atacó como cuando optó por protegerse.

Luna y Barraza no logran conectar de lleno la pelota.