Confesiones de una mujer que no se la cree

Andrea Frigerio es frontal. A veces parece que piensa en voz alta. Puede decir "entre vos y yo" y contar algo como si fuese una amiga de toda la vida. Suena familiera, transparente, contesta antes que se le termine de formular una pregunta, y se compromete con lo que dice. Pese a su halo de femme fatal, por momentos parece una mujer del montón. "Soy una laburante más, no me siento una diva", señaló en un alto de las la tira de Ideas del Sur "Los Roldán". Y no duda en confesar uno de sus sueños: "Estoy desesperada por hacer cine, pero hay que hacer la plancha, todo llega".

"Yo me siento una laburante más, una persona que ha trabajado desde los 20 años. Ahora tengo 42 y me encanta que me reconozcan mi trabajo", indicó. Aunque muchos la ven como la sucesora de Mirtha y Susana, ella no se siente una diva. "Ser diva es algo que no tiene que ver conmigo. Quizá con el tiempo y después de mucho trabajo, logre tener una imagen muy fuerte que se pueda parecer a eso. Pero nunca adoptaría una postura de diva", consideró.

La actriz destacó que anhela pasar a formar parte del séptimo arte: "Estoy desesperada por hacer cine. Me encantaría. ¿Sabés qué? Entre vos y yo, yo pastoreé mucho, viste, fui modelo, después conductora, y siempre tuve íntimamente la sensación de que esto era lo mío. Y llegó cuando tenía que llegar. A lo mejor si hubiese empezado a ser actriz a los 19 años no pasaba nada. Mi primer trabajo en televisión fue con Tato Bores, pero me fui en el primer programa porque no me gustó mi participación. Después me fui para el lado del modelaje y tardé mucho en volver. No era el momento. Yo creo en el destino, ¿viste? Eso lo aprendí con el tiempo. Mejor hacer la plancha y que te lleve la vida donde quiere. Obviamente en la diaria, hay que laburar hay, meterle garra. Pero creo que las grandes decisiones las toma el de arriba".