Se aprobaron los primeros proyectos del programa manos a la obra

Jefes y jefas de hogar de Fighiera pasan de desocupados a empresarios

El gobierno los subsidia para instalar una fábrica de galletitas y otra de dulces, mermeladas y confituras

Osvaldo Flores / La Capital

Fighiera. - "No vemos la hora de empezar a trabajar para ganarnos el pan de cada día". Así resumieron su esperanza un grupo de desocupados que, en unos días más, se convertirán en flamantes fabricantes de galletitas y dulces merced al programa Manos a la Obra. Los dos proyectos presentados por los beneficiarios del plan Jefes y jefas de hogar fueron los primeros en ser aprobados en la región.

La fábrica de galletitas "Suspiros" albergará el sueño laboral de cinco vecinos de Fighiera, que ya se han distribuido los trabajos y responsabilidades. Así, Luis Fregiati será responsable del grupo y encargado de la comercialización, María del Carmen Sierra tendrá a su cargo la compra de insumos y comercialización, María Alejandra Machuca se encargará de la preparación de las masas y sobado, ayudada por Susana Alegre, que también armará las galletitas, mientras Graciela Argutti colaborará con esta última tarea y será la responsable de la cocción y envasado del producto final.


Interés de comerciantes
"Luego de analizar qué tipo de carencia existía en nuestra zona en el rubro de panificación y similares, y por la capacitación de quienes integramos este proyecto, elegimos la elaboración de galletitas. Además al informar a comercios aledaños las características que tendrá nuestra producción comprobamos un vivo interés de parte de ellos, lo cual fue un impulso aún mayor para nuestro proyecto", se entusiasmaron las inminentes fabricantes de galletitas.

Mediante el programa nacional Manos a la Obra recibirán un subsidio de 15 mil pesos para la compra de maquinarias e insumos. Por eso, la actividad ya es febril en la Casa Comunal de la Cultura, donde momentáneamente estará instalada la fábrica. Es que no quieren perder ni un minuto y están abocados a requerir presupuestos y cumplimentar los trámites requeridos por el programa para comenzar con la producción.

Por su parte, de la mano de la referente María Cristina Acosta y las beneficiarias Rufina Sanabria y Fermina Encinas, el sueño del trabajo digno se cristalizará con la fábrica de dulces "Sabores de mi tierra", que producirá mermeladas, dulces y confituras.

Claro que la comuna juega un rol preponderante en este ansiado sueño de crear trabajo: "Estamos orgullosos y entusiasmados por estos dos proyectos, que han sido los primeros en ser aprobados por la regional Rosario del Ministerio de Desarrollo Social. Desde nuestro gobierno siempre hemos impulsado la creación de fuentes de trabajo, y en esta oportunidad estamos doblemente complacidos porque incorporaremos al mercado laboral a gente que realmente lo merece", señaló el jefe comunal de Fighiera, Carlos Mariani.

"Mientras esperamos que se apruebe otros de los proyectos presentados, una fábrica de tortas y churros que se llamará "Dulcinea", la comuna redobla sus esfuerzos para apuntalar el sueño de los desocupados que ansían ganar dignamente su pan. Por eso los hemos ayudado con la elaboración de los proyectos, a cargo de nuestra ingeniera Clarisa Armando, y facilitándoles capacitación y el lugar para trabajar", añadió Mariani, y sostuvo: "De esta manera, Fighiera continúa siendo un ejemplo de emprendimiento y laboriosidad".

La labor ya es febril en la Casa de la Cultura.