Chabás se consolida como la capital de los emprendedores

En la cuarta edición de Fespal se entregaron créditos a productores de rubros no tradicionales

Con 170 expositores, la cuarta edición de la Feria Santafesina de Productos Alternativos (Fespal), ratificó su lugar como referente de las producciones alternativas a nivel nacional. Una posición que comenzó a ser tomada en cuenta por el gobierno nacional, en busca de modelos para movilizar en forma eficiente recursos destinados al desarrollo social.

En tiempos en que se impone hablar de cluster, innovaciones organizacionales y redes empresarias, la experiencia de Chabás expresa esa tendencia a nivel de emprendedores no tradicionales. Ranas, conejos, arándanos, caracoles, abejas, dulces, licores, forestación, chinchillas, agroturismo, yacarés, tejidos, plantas aromáticas y varios etcéteras comienzan a entrelazarse, con la participación del Estado y las universidades, para generar un ambiente de sostenibilidad a los emprendedores. Para decirlo en otro término de moda, los "chiquitos" también comienzan a generar capital social.

Para muestra, un caso. Hugo Don inició hace cuatro años un emprendimiento familiar. Con el bagaje de su conocimiento sobre el sector frutícola apostó a la elaboración de licores y aguardientes de frutas con la base de una especial selección de la materia prima. En pocos días inaugurará una planta con capacidad de producción para 15 mil botellas anuales, que entre otras cosas le permitirá dar el salto del circuito de ferias al gran mercado comercial. Ya tiene acuerdos con varias casas de delikatessen rosarinas y con la Sociedad de Enófilos. "El plan de negocios fue elaborado por una consultora de Buenos Aires y uno de los objetivos es entrar en negocios del circuito turístico internacional, como la costa, Calafate o Bariloche", señaló.

José Vilches, en cambio, es criador de conejos. Con un plantel de 300 madres, y un promedio de 150 animales en engorde, provee conejos en pie a uno de los tres grandes frigoríficos exportadores. El negocio principal es la carne pero también es criador de razas con aptitud peletera. Las ventas al exterior de carne de conejo se duplicaron el último año a nivel país y en el sector ven al negocio camino a convertirse en una nueva apicultura, una actividad que durante años se pensó como "alternativa" y hoy exporta en valor algo menos que lo ingresa al país por exportaciones de carne a través de la cuota Hilton.

Los productores de conejo de la zona de Chabás están trabajando en su asociación, con miras a ganar masa crítica e integrar verticalmente su producción. La idea es llegar a instalar un frigorífico propio pero mientras tanto, una carnicería de la zona adaptó las instalaciones para depostada de pequeños animales.


La diversificación
"Si juntamos a 40 productores de conejos, son al menos 80 personas ocupadas, la misma cantidad de gente que trabaja en la aceitera de la zona", señaló Osvaldo Salomon, presidente de la comuna de Chabás. El funcionario recordó que la promoción de este tipo de actividades comenzó como una opción frente al declive del precio de los granos. La localidad está en el corazón de la zona núcleo sojero, cuenta con una fábrica aceitera, dos molinos y recibe, en épocas de cosecha, un tránsito directo de 60 mil camiones.

"Hoy la situación es totalmente inversa, estamos en una región donde hay que pedir turno para conseguir un pintor, pero la apuesta a los alternativos sigue siendo válida para volcar los excedentes de la soja", señaló.

Claro que no todos los emprendimientos son de la misa envergadura. La red de emprendimientos de Chabás se inició precisamente por uno de los rubros que más inversión requieren, como es el caso de los arándanos. La producción de berries juega ya en las grandes ligas de la fruticultura. Incluso, la cooperativa de productores de arándanos, que el año pasado inauguró una moderna planta de empaque, se enfrenta a la necesidad de aumentar la escala para mantener su competitividad frente a la ola inversora que hay en el sector.

Héctor Busilachi, líder del grupo de productores y alma mater del proyecto de producciones no tradicionales con epicentro en Chabás, explicó que para este año se están planteando el objetivo de saltar de las 80 hectáreas actuales a 100 hectáreas. El año pasado inauguraron una moderna planta de empaque. Una fija en la Fespal es, precisamente, la presencia del laboratorio Cuinex, el principal productor de plantines en el país.

La integración de la producción no termina allí. Un grupo asociativo conformado por mujeres de Chabás elabora y comercializa en el mercado interno (industria del helado y farmacias de Rosario y Córdoba) el descarte de los arándanos que, por cuestión de tamaño, no entran en la exportación.

Una de las novedades de la última edición de Fespal fue la presentación, por parte de Ricardo Bianni, del Ministerio de Producción, de un proyecto forestal para mitigar daños producidos por tormentas. Se trata de la posibilidad de un ofertar un servicio nuevo a la producción agropecuaria. Chabás, cabe recordar, fue una de las localidades más castigadas por el casi-tornado que asoló al sur santafesino el año pasado.


Apoyo a emprendedores
Entre otros, en la Fespal 2004 estuvieron presentes Indaba, un grupo de cinco empresas marplatenses dedicadas a la cría extensiva de caracoles, que exportó 6 mil kilos de caracol vivo el año pasado a Francia; la comercializadora de nuez pecan La Reina, una elaboradora de cigarros de la localidad bonaerense de Sierra de Los Padres; el emprendimiento de un grupo de mujeres de Alcorta que, a partir de los recursos de los planes jefes y jefas de hogar comenzaron a fraccionar yerba que venden en coquetos empaques con la marca Titrayú; un rosarino que con la marca "Puente Rosario-Victoria" lucha por entrar en los grandes súper con sus carnes ahumadas de boga, conejo y pavo; una fábrica de jaulas para pequeños animales o los productores de ranas toro nucleados en Biofrog.

A través de la Fespal, que se constituyó como asociación civil y trabaja todo el año en capacitación y promoción de emprendimientos, el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación ya volcó créditos por 200 mil pesos a productores y asociaciones de la región, con un alto porcentaje de recupero. En el marco de la última edición se entregaron nuevos beneficios a proyectos vinculados con la cunicultura, textiles, calzados, herrería y apicultura.

La Fespal se realizó en el Parque del Ferrocarril.