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 domingo, 09 de mayo de 2004

Las mochilas pueden causar diversos traumas físicos a los niños si se usan muy cargadas
Dolores musculares, contracturas y malas posturas son las consecuencias más habituales

Las mochilas se han convertido en elementos imprescindibles para los escolares, pero no han resuelto uno de los problemas básicos, como el que plantea trasladar una cantidad de libros y útiles todos los días. Así cargadas entonces, pueden provocar dolores, contracturas musculares y problemas de postura corporal que influyen negativamente en el crecimiento, según sostienen especialistas.

"En general los chicos manifiestan dolor y problemas musculares cuando el peso de la mochila es muy grande, y se cansan", señaló Pablo Juárez Marazzo, médico de Ortopedia y Traumatología del Hospital de Clínicas de Buenos Aires.

La Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) sostiene que el cuerpo de los chicos no está preparado para llevar el sobrepeso que habitualmente llevan en sus mochilas y portafolios y advierte que produce contracturas musculares importantes y lesiones musculares.

Los especialistas sostienen que no hay estudios sobre las consecuencias de llevar sobrepeso, aunque hay consenso acerca de lo que puede cargar un chico, que "no debería exceder el 10 ó 15 % de su peso corporal", precisó Carlos Alberto Tello, jefe de patología espinal del hospital Garrahan. La misma recomendación fue realizada por la SAP al plantear las medidas de prevención de accidentes en el ámbito escolar.

Tello también expresó que llevar una mochila donde el peso está mal colocado y es excesivo "es perjudicial porque produce dolor, malas posturas, contracturas y molestias en la cintura y en la espalda".

La primera prevención está en que los chicos no carguen tanto las mochilas, distribuir bien su peso y que las escuelas tengan gabeteros o los maestros regulen el material que deben llevar los chicos a la escuela, según recomiendan los médicos.

"La mochila tiene que estar centrada y con el peso descargado sobre el nivel lumbar, a la altura de la cintura porque si el chico usa la mochila muy arriba se inclina para adelante, se esfuerza y sacrifica todos los músculos, y después tiene dolores y molestias", expresó Juárez Marazzo.

Cuando la mochila está muy baja es incómoda porque altera la marcha y genera tanto peso en la parte posterior de las articulaciones de la columna que produce dolor.

Se recomienda que los padres observen cómo lleva el niño la mochila, cuánto camina y controlar el peso para evitar consecuencias por el uso prolongado. (Télam)

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Se convirtieron en útiles imprescindibles, pero las mochilas deben usarse con cuidado.

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