| domingo, 02 de mayo de 2004 | Sistema financiero. Los habitantes de la provincia se familiarizaron con la banca electrónica tras el corralito, pero demandan cercanía y trato personalizado Los santafesinos aún prefieren a los bancos de carne y hueso Una encuesta realizada en todo el territorio de Santa Fe da un perfil de los clientes y sus demandas Sandra Cicaré / La Capital El banco aún sigue representando una entidad corpórea, a la que se le demanda atención personalizada y presencia constante para los habitantes de la provincia de Santa Fe. Más allá de que las transacciones electrónicas o la banca virtual marcan la tendencia de las nuevas operaciones financieras en el país y el mundo -no sólo para empresas sino además para individuos- los santafesinos parecen aún más proclives a un esquema donde prevalezca la cercanía, la confianza y el trato con el ser humano.
De todos modos, el corralito hizo lo suyo. Esto es, la confiscación de los depósitos de Domingo Cavallo y la imposibilidad de hacerse de cash en mano generó una nueva modalidad -por cierto coercitiva- de relacionarse con el banco. Así, la gente comenzó de a poco a encariñarse con le cajero automático al que tuvo que recurrir para sacar su dinero, para hacer pagos de grandes montos vía transferencia electrónica y hasta para realizar las transacciones más comunes como saldar tarjetas de crédito o impuestos.
De este modo, lo que en otro momento hubiese demandado más tiempo de adaptación -para hacer el cambio de la banca personalizada a la electrónica- por ésta circunstancia se instaló como una práctica cotidiana de los argentinos.
Con múltiples matices de acuerdo a la zona de la provincia que se trate, un encuesta encarada por la consultora MercadoData.com, que lidera Andrés Mautone, da cuenta de esta caracterización del sistema financiero por el que optan los santafesinos.
Los datos relevados en las principales ciudades de Santa Fe aportan datos a esta conclusión:
A la hora de consultar a los encuestados sobre la forma de relacionarse con el banco, el 81,8 por ciento lo hace recurriendo a la sucursal, un 12,3% elige la banca telefónica mientras que sólo el 5,9% la banca electrónica o homebanking.
En estas elecciones prevalecen las diferencias tanto de edad como sociales. Por caso, entre los consultados que se relacionan con su banco yendo a la sucursal se destacan las mujeres mayores de 61 años de edad, y ubicadas entre los sectores de menores recursos (nivel D). También se distinguen los encuestados jubilados o pensionados, los viudos, los santafesinos con estudios primarios incompletos y teniendo en cuenta las regiones, se destacan los residentes de las ciudades de Cañada de Gómez, Reconquista, y Villa Constitución, como también los productores agropecuarias ubicados en la zona sur de la provincia.
Por su parte, entre los que lo hacen a través de la banca telefónica sobresalen los hombres, comprendidos entre los 31 y 45 años, y pertenecientes a los sectores medios (segmento C2, C3). Asimismo, entre ellos se destacan los encuestados que se encuentran en la actualidad desocupados, divorciados, los que poseen estudios terciarios o universitarios incompletos y radicados en la ciudad de San Lorenzo. También los titulares de pymes ubicados en la ciudad de Santa Fe.
Finalmente, entre los que los que utilizan la banca electrónica (homebanking) se distinguen también los hombres, ubicados en la misma franja etaria y pertenecientes a los sectores de mayores recursos (nivel BC 1). Asimismo, entre ellos se destacan los encuestados que son empleados del sector público, mayoritariamente solteros, que poseen estudios terciarios o universitarios incompletos y residentes de la ciudad de Venado Tuerto, y los comerciantes y productores agropecuarios, y empresarios que residen en Rosario.
La era pos corralito Después del corralito y de la bronca generalizada de los clientes con sus bancos, las entidades financieras comenzaron este año con una operación limpieza de cara, que no sólo fue fácticamente una renovación de sus fachadas deterioradas por los escraches de ahorristas, sino también una política de salir a captar clientes con renovada oferta de servicios.
Aún así, para los santafesinos, aún no parecen encontrar rebotes de esta situación.
A la hora de consultarles sobre la evolución de los servicios de los bancos respecto del año anterior, el 61,2 por ciento de los encuestados manifestó que permanecen igual y un 5% que empeoraron.
En tanto sólo un 26,2 por ciento encontró mejoras en las ofertas de las entidades.
Entre los consultados que, con respecto al año anterior, consideran que los servicios del banco permanecen igual se destacan los particulares residentes de las ciudades de Santa Fe y Villa Gobernador Gálvez, y los comerciantes de Rosario.
Por su parte, entre los que consideran que los servicios del banco han mejorado se destacan los particulares que residen en la ciudad de Cañada de Gómez y los titulares de pymes ubicados en la zona sur de la provincia.
Aunque las entidades salen al ruedo con ofertas en las que incluyen la tecnología de punta, por ahora los santafesinos -tal vez por la experiencia que dejaron los últimos años- siguen prefiriendo la atención personalizada.
La encuesta reveló que entre los reclamos de mejoras los santafesinos priorizan la mayor cantidad de personal en horas pico y la eliminación de las colas. Estos pedidos están concentrados mayoritariamente en la población adulta, de mayores recursos y con niveles de formación más altos.
De este modo, aunque éstos sectores son los que tienen mayor acceso a la tecnología y por ende, son los más proclives a familiarizarse con la banca electrónica, de hecho aún prevalece la figura de una banca más personalizada entre los santafesinos.
También esto quedó plasmado en la cantidad de veces que realizan retiros por ventanilla por sobre las operaciones electrónicas.
Casi el 50 por ciento de los encuestados realiza entre dos y cinco extracciones mensuales en la ventanilla del banco y aquí sobresalen los particulares residentes en Reconquista y Villa Constitución, comerciantes y productores agropecuarios que residen en Santa Fe y en el norte provincial respectivamente.
Me voy al banco Casi el 50 por ciento de los encuestados bancarizados santafesinos usará la frase "me voy al banco" con mucha frecuencia. La encuesta de Mercadodata.com señala que el 28% de los consultados hace hasta tres visitas por mes a la entidad, mientras que un 21% lo hace hasta cinco veces. Esta cifra contrasta con un 30% que sólo va al banco una vez en treinta días.
En el universo de la mayoría sobresalen los particulares residentes de las ciudades de Cañada de Gómez y Reconquista, los comerciantes y productores agropecuarios, y los empresarios que residen en Rosario.
Mientras que, entre los que van sólo una vez al banco se destacan los particulares residentes en Villa Constitución, los titulares de pymes y los empresarios de la ciudad de Santa Fe.
Otra muestra de que los santafesinos prefieren una banca con sesgo personalizado quedó plasmado en la cantidad de llamadas telefónicas que realizan a la entidad.
Más del 45% realiza entre dos y cinco llamadas mensuales a su banco y entre ellos se destacan los particulares residentes en San Lorenzo y Rafaela, los productores agropecuarios y los titulares de pymes y los empresarios que residen en la zona sur de la provincia y en Rosario.
Aún así la bancarización forzada hizo lo suyo y pese a que la encuesta demuestra que el 82 por ciento de los encuestados va a la sucursal a realizar operaciones frente al 5,9% de la banca electrónica, quienes utilizan esta última opción lo hacen con frecuencia.
El relevamiento indica que el 73 por ciento de los consultados que usa el cajero automático, lo hace entre 2 y 10 veces por mes, mientras que el 52 por ciento que hace operaciones por homebanking utiliza esta metodología entre dos y diez veces mensuales. Los fanáticos de la web se localizan mayoritariamente en Rosario y Santa Fe. enviar nota por e-mail | | |