El ex presidente dijo que la devaluación fue lo que salvó a la Argentina

Severa réplica de Duhalde a Kirchner

El bonaerense defendió la salida de la convertibilidad y aseguró que no es serio el juicio contra Menem

El conflicto de baja intensidad que venían sosteniendo el presidente Néstor Kirchner y su antecesor Eduardo Duhalde subió imprevistamente de voltaje. El bonaerense declaró ayer que la devaluación "fue lo que salvó al país", en réplica a la afirmación del jefe del Estado, quien criticó la forma "poco prolija" en que se salió de la convertibilidad. Duhalde también reiteró una frase que ya había causado el enojo del santacruceño: "Hasta que no se salga del default, el país no es confiable". Por si fuera poco, señaló como "poco serio" el proceso judicial que enfrenta Carlos Menem, lo que generó la inmediata gratitud del riojano hacia su rival histórico en las sucesivas disputas dentro del peronismo.

En medio de esta puja, el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, salió a contestar y deslizó que esa presunta "poca confiabilidad" que el bonaerense dice que tiene el país quizás sea, precisamente, producto de la devaluación que impulsó el ex presidente en 2002.

"Es una visión que tiene Duhalde sobre la confiabilidad. En aquel momento la situación era muy difícil, se tomó una decisión y esa puede (sic) generar resultados tales como que la Argentina se haya vuelto un país poco confiable, como dice Eduardo Duhalde", disparó el funcionario, quien fuera un estrecho colaborador de Domingo Cavallo.

Pese a la defensa de las medidas que tomó en su breve paso por la Casa Rosada y de las reservas sobre la mirada que el mundo tiene de la Argentina, el líder del PJ rehusó profundizar el cortocircuito que mantiene con Kirchner.

En este sentido, Duhalde advirtió que "sería un disparate total" que esas diferencias de opinión puedan complicar la aprobación de leyes en el Congreso, en particular en la Cámara de Diputados, donde el duhaldismo es mayoría en el bloque peronista.

"Lo único que importa en este momento no son los partidos políticos, las opiniones de Duhalde o las opiniones de otros dirigentes políticos; ni siquiera tiene tanta importancia lo que digan los del gobierno, sino lo que hagamos", alertó el bonaerense.

Más allá de los mensajes conciliadores, se abrió una herida en la relación entre ambos y los próximos días serán clave para saber cómo se reposicionarán los duhaldistas que hacían profesión de fe hacia el gobierno de Kirchner.


Mensajes cifrados
Se sabe que en política no hay frases inocentes. Cuando la Justicia federal ordenó la captura internacional de Menem, Hilda Chiche González dijo que podría haber "un exceso" en el procedimiento. Pero fue ayer que el propio Duhalde sostuvo que "no es serio" el proceso judicial contra Menem y consideró que el riojano sufre "una persecución", aunque descartó que detrás de ella esté el gobierno nacional.

"Me parece que después de un gobierno de 10 años, un ex presidente tiene temas que afrontar en la Justicia, pero éstos deben ser importantes, cosas graves, no éstas que tiene Menem", opinó Duhalde a una radio porteña.

Para Duhalde, el proceso contra Menem "es poco serio para un país que quiere serlo. Hay persecución, pero descarto que sea por parte del gobierno".

Enterado de estas afirmaciones, el riojano salió a devolver gentilezas. El ex presidente admitió que está formando "desde Chile" un polo "opositor" al gobierno del presidente Kirchner, y que se sale "de las casillas" para volver al país y presentarse como candidato para presidir el justicialismo porque, según dijo, al partido "lo destruyeron".

Pero la sorpresa la dio al expresar un fuerte acercamiento al duhaldismo. En primer lugar dijo que estaba "agradecido" por las declaraciones en su defensa del ex presidente Eduardo "Duhalde y de su esposa" Chiche, quienes calificaron los pedidos de captura internacional en contra del ex mandatario como "una exageración".

Luego elogió la postura de Chiche Duhalde, quien se enfrentó a la primera dama, Cristina Fernández de Kirchner, en el congreso del PJ de Parque Norte. "La señora de Duhalde estuvo muy bien", afirmó Menem.

Duhalde y su esposa Chiche siguen marcando diferencias con Kirchner.