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 miércoles, 14 de abril de 2004

Novedad en incontinencia urinaria

En la actualidad, los tratamientos fisiátricos de recuperación del piso pélvico y el suministro de fármacos, son utilizados como complemento de novedosas cirugías mínimamente invasivas para tratar la incontinencia urinaria femenina. La intervención consiste en colocar bandas debajo de la uretra, llamadas sling suburetral. Esta técnica data de 1994 y desde entonces fueron creados diversos tipos de slings con materiales heterólogos, de mayor y menor biocompatibilidad. La novedad es la creación de sling de última generación, autoajustables que tienen la capacidad de adherirse sin la utilización de puntos o de materiales heterólogos de fijación.

"Los nuevos sling, además de ser reajustables, posibilitan reajustar la tensión en caso de repetirse el problema", explicó el doctor Miguel Zangone, especialista en uroginecología del Centro de Estudios en Ginecología y Reproducción de la ciudad de Buenos Aires.

Esta molesta alteración de la vejiga suele no ser reconocida como una enfermedad por quienes la padecen. Las pérdidas involuntarias de orina afectan principalmente a las mujeres menopáusicas, las que padecen sobrepeso, las que han sido sometidas a una histerectomía, las que pasaron los 60 años o las que tuvieron un parto complicado, entre otras en las que se registra un descenso de los órganos vesicales y rectales que puedan derivar en incontinencia por insuficiencia de los músculos del suelo pelviano.

"En el 70 u 80 por ciento de las pacientes con incontinencia la causa responde a factores obstétricos, ya sea por multiparidad o porque han tenido una segunda etapa de parto muy prolongada, utilización de fórceps o desgarros perineales en el parto por chicos de alto peso, o bien episiotomías. Aunque mucho menor, otro grupo de afectadas es el de las jóvenes que practican deportes de alta competición como lanzamiento de bala, carreras pedestres de velocidad, equitación o salto, quienes deben preparar fisiátricamente su periné para hacer frente a la presión abdominal que provocan esos deportes", agregó Zangone.

Frente a este problema, las soluciones son múltiples, y van desde el tratamiento farmacológico pasando por ejercicios musculares perineales, hasta llegar a cirugías minimamente invasivas que les otorgue el control funcional de la uretra y le devuelva la seguridad perdida.

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