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 domingo, 04 de abril de 2004

Muchas parejas apuestan hoy a continuar juntas pero no en convivencia
Una psicóloga analiza las nuevas formas de relación

Que los jóvenes que se casaron en los 90 sean hoy por hoy los que más se divorcian, que cada vez se opte menos por la convivencia o que muchos separados vuelvan a reencontrarse, pero a escondidas de sus hijos: estas son sólo algunas de las nuevas formas de relación de las parejas en la actualidad que analizó para La Capital la psicóloga y master en problemática del género, María del Carmen Marini.

Para ella, tradicionalmente las parejas estaban unidas o separadas, en cambio hoy se abrió el lugar para el "ni".

"No viven juntos -explicó la especialista- pero vacacionan juntos, o se mudan a casas próximas para estar a mano, también con los hijos".

Los casos se dan, según dijo Marini, porque es mucho más complejo para estas personas sostener un proyecto total, algo que también es resultado de la crisis sociopolítica que ha instalado insatisfacción, conflicto e incertidumbre por doquier.

Otro fenómeno que según la psicóloga expresan muchas de sus pacientes en la clínica es el de las parejas ya separadas que vuelven a salir, a escondidas de sus hijos o de sus propios padres. Algo así como tropezar dos veces con la misma piedra, donde lo curioso es la clandestinidad de las relaciones.

"Estas parejas tienen miedo a la censura de sus padres e hijos, quienes de algún modo les piden que no los vuelvan a desequilibrar con los problemas de su relación", indica Marini.

En cuanto a los jóvenes que se divorcian, no se sorprende. Dice que es muy frecuente el fracaso del proyecto común de quienes tienen entre 30 y 50 años y pertenecen a una clase media acomodada.

"Esto se debe a que hoy hay muchas alternativas al matrimonio y tener un proyecto propio tiene otro valor. Sobre todo para las mujeres que en otras épocas ordenaban sus vidas sólo en función del entorno: esposos e hijos".


Sex and the City
No obstante, Marini sostiene que las mujeres actuales, siempre más reacias a la ambigüedad que los varones, no han perdido su sueño por el amor romántico.

"Un buen ejemplo de ello es la serie de televisión Sex and the City. Salvando las distancias, esas desenfadadas mujeres de Nueva York, libres, con inserción social y profesional, también reconocen estar solas y buscar el amor de un hombre honesto, sincero y leal. Y no creo que haya que resignar la expectativa", dijo.

Es que para la especialista todos siguen buscando por el resto de sus vidas ese paraíso perdido que significó el vínculo acogedor entre la madre y el bebé. "Esa relación no se dará más -aseguró- pero eso no significa que no se pueda seguir buscando algo bueno, que nos contenga".

Y remató con otra observación hacia las mujeres que se quedan solas. "Ellas se agrupan fácilmente en recíproca asistencia. Los varones en cambio son más herméticos. Y si no, pensemos, ¿quiénes están a nuestro lado en los momentos más difíciles? En general, las mujeres".

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Marini afirma que las mujeres actuales no han perdido el proyecto de amor romántico.

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