| domingo, 29 de febrero de 2004 | Porto Seguro: La epopeya del descubrimiento Acuarios, antiguas iglesias y playas solitarias, atracciones del nordeste de Brasil Desde el momento en que se arriba al aeropuerto de la ciudad de Porto Seguro, comienza a percibirse un entorno realmente mágico. Cientos de turistas se dispersan como si fueran hormigas en busca de los micros que los llevarán a sus respectivos alojamientos.
La ciudad de Porto Seguro se sitúa en el estado de Bahía, al sur de la región noroeste de Brasil. Tiene una costa de 932 kilómetros de extensión y su territorio se caracteriza por la diversidad de dunas, planicies y una meseta.
A la hora de elegir lugares para recorrer no se puede dejar de visitar el Memorial de la Epopeya del Descubrimiento. Aquí hay una réplica a escala de una de las naves que trajeron a Pedro Alvarez Cabral en el año 1500. El lugar fue inaugurado el 22 de abril de 2003, y está ubicado en la Praia do Outeiro da Gloria, en la Orla Norte de Porto Seguro y a sólo 1 kilómetro del centro de la ciudad.
Una visita a este lugar hace pensar acerca de cómo sería una navegación con una tripulación de entre 300 y 500 personas en una embarcación en la que sólo había un camarote y era ocupado por el capitán, además de no contar con baños para la tripulación.
Primera iglesia A pocos metros de distancia se observa el local donde fue erguida la primera iglesia de Brasil, lugar donde se celebró la primera misa por parte de los portugueses.
Para adentrarse en la historia de este fantástico territorio norteño hay que visitar también la Matriz de Nossa Senhora da Penna, construida en 1535 y que alberga la imagen de San Francisco de Asís (primera traída a Brasil) y la de Nossa Senhora da Penna (patrona de la ciudad).
A la hora de introducirse en el mar, Porto Seguro es un lugar privilegiado. Sus 90 kilómetros de playas con arenas claras, palmeras y un sol realmente resplandeciente invitan a disfrutar hasta últimas horas de la tarde. Para elegir existen las praias do Cruzeiro, Curuípe, Itacimirin, Mundaí, Taperapuá, Río dos Mangues, Ponta Grande y Mutá, todas en el litoral norte. También vale la pena conocer la zona de Trancoso.
Otra de las opciones es visitar el Recife de Fora donde se practica snorkel y apreciar en sus 17,5 kilómetros cuadrados, 16 de las 18 especies de corales existentes en el mundo, así como peces, rayas y tortugas.
Una atracción muy difícil de olvidar es la isla de Los Acuarios, a la que se llega mediante unos barcos antiguos (scunas) que recorren cada media hora la distancia desde el puerto de Porto Seguro a la isla. Al llegar se encuentra una exuberante vegetación, en su mayoría palmeras. Escaleras mediante se accede a acuarios que en su interior albergan las más variadas especies del mundo marino. En uno de ellos hay 2 enormes tiburones.
Recorrida nocturna Después de cenar en los restaurantes que ofrecen menúes variados, es cita obligada la Passarela do alcool, un lugar tradicional donde se montan una serie de barraquinas (improvisados barcitos al paso) que ofrecen exquisitos tragos tradicionales, preparados en el momento.
A la hora cero, todo queda literalmente "vacío" y la gente comienza a dirigirse a los complejos nocturnos. Cada noche se organiza una fiesta en un lugar distinto y los jóvenes, y los que no lo son tanto, acuden dispuestos a disfrutar de los ritmos lugareños.
Alejandro Palacios enviar nota por e-mail | | Fotos | | Palmeras y mar azul, en Porto Seguro. | | |