Los jóvenes pedimos protección

La presente carta es un comentario acerca de la nota aparecida el 24 del corriente en la sección Ciudad de La Capital titulada "Unos 30 jóvenes cayeron desde un puente al intentar entrar a una disco". Me parece que se le está dando un encuadre erróneo a la noticia, no se trata de publicitar un boliche sino de tomar conciencia de lo poco que se nos protege en la noche. Es una falta de respeto hacia los jóvenes que asistimos a estos tipos de eventos que estén organizados de esta manera. ¿Dónde está la protección?, ¿estas cosas no se pueden prever? y, sobre todo, si de antemano saben qué cantidad de público va a presentarse, por qué la venta de entradas es anticipada. Vuelvo a repetir: no se está tomando el tema con la seriedad que reclama. ¿Qué está diciendo este empresario sobre " la mala suerte"? Claro, con un tipo así al frente de una disco no se puede esperar demasiado. ¿Qué responsabilidad asume este hombre? La verdad, estoy indignada y creo que expreso lo que la mayoría de los jóvenes sienten ante estos sucesos. Nos sentimos constantemente desprotegidos. Quiero dejar expresamente en claro que esto "no fue un accidente", sino la consecuencia de algo mal manejado, mal hecho desde el comienzo. No seamos hipócritas y no le echemos la culpa al destino o la suerte porque eso es un engaño. Aquí las causas de estas cosas tienen nombre y apellido. ¡Exijamos que se respeten nuestros derechos! ¡No nos dejemos manosear más! ¡Reclamemos lo que nos corresponde!

Paula Cervigni