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 sábado, 14 de febrero de 2004

El gobierno dio el primer paso del ajuste de tarifas de servicios públicos
El GNC aumenta 12 por ciento
El combustible llegará a0,60 peso en Rosario. Empresarios especulan que sería más. Quejas de taxistas

El GNC (gas natural comprimido) aumentará un 12 por ciento, lo que representa entre 6 y 7 centavos por metro cúbico para los consumidores, a partir del 15 de marzo próximo. De este modo, en Rosario los usuarios del combustible pasarán a pagar alrededor de 0,60 peso por metro cúbico, cuando las estaciones de servicio trasladen los mayores costos al precio final. El incremento surge en el marco del ajuste de tarifas que dispuso ayer el gobierno para la electricidad y el gas que se paga en el segmento de grandes usuarios e industrias, que oscila entre el 15 y 25 por ciento.

De estas subas quedaron excluidos la totalidad de los usuarios residenciales y pequeños comercios, aunque el coletazo del aumento llegará a estos sectores debido al incremento que experimentarán algunos productos industriales y el GNC, combustible utilizado no sólo por transportes de servicio público como taxis y empresas de fletes, sino además por miles de particulares.

Los propietarios de taxis de la ciudad, el transporte público que utiliza mayoritariamente GNC, salieron al cruce de esta decisión y advirtieron que un incremento en el combustible impactará en la calidad del servicio.

El titular de la Asociación de Titulares de Taxis Independientes (Atti), Mario Cesca, indicó que "los taxis tienen la tarifa congelada desde hace doce años y las cargas laborales son cada vez más altas", con lo cual un incremento de los costos por efecto de la suba del combustible impacta en "el número de personal empleado y por ende, en el número de unidades en la calle".

Por otra parte, precisó que el encarecimiento de los costos agudizaría aún más el mantenimiento de las unidades. "Si hasta ahora no podíamos reponer las unidades y por eso pedimos dos años de plazo a las autoridades, ahora ni siquiera vamos a poder repararlas", agregó Cesca.

De todos modos, el presidente de Atti arremetió contra las estaciones de servicio por los altos márgenes de ganancia que tienen entre el precio de compra del gas y el de venta al público.

"Como la comercialización es un sector que no está regulado, las estaciones compran el gas a 0,15 peso y los venden a 0,53 en Rosario", dijo Cesca. Con lo cual, "un incremento del 25% en el precio que le cobran los extractores o transportistas representaría 0,18 peso, muy por debajo de los 0,53 que actualmente cobran", se quejó.

Desde los sectores privados como desde el propio gobierno ya dan por hecho que el GNC aumentará en las bocas de expendio.

Empresarios de estaciones de servicio estimaron que en Rosario la suba superará los 0,60 pesos y podría llegar a los 0,65. Fundamentaron sus cálculos en que además del incremento del precio, el sector está gravado con una tasa municipal del 10,6 por ciento.

Distintos son los cálculos que realizaron en Buenos Aires. "La justa incidencia sobre el precio final no podrá superar los 6 ó 7 centavos" indicó el secretario de Energía, Daniel Cameron, una estimación que está en línea con el ajuste de "entre 5 a 10 centavos" proyectado por el titular de la cámara que nuclea a las estaciones de expendio de GNC a nivel nacional, Enrique Fridman.

"El presidente (Néstor Kirchner) nos autorizó a discutir un aumento para este sector que puede estar entre 15 y 25 por ciento, dependiendo de la distribuidora porque hay distintos componentes de transporte y valor agregado de distribución", informó ayer Cameron.

Estos porcentajes dijo "están enmarcados en una matriz de costo de las estaciones de expendio, como sueldos, recupero de capitales, es decir que no es un precio que se vaya a trasladar al usuario final, excepto en su justa incidencia que estimamos no debiera ser más de 6 ó 7 por ciento".

El GNC se vende a un precio que varía entre 45 y 58 centavos el metro cúbico dependiendo de la zona del país, "por lo que el aumento no debiera ser de más de 6 ó 7 centavos, con lo cual es un impacto para nada complejo, ni que cree problemas", consideró el funcionario.

Por su parte, la subsecretaria de Defensa de la Competencia y del Consumidor, Patricia Vaca Narvaja, afirmó ayer que "si la tarifa se traslada racionalmente a la estructura de costos, el incremento del precio final no puede ser superior a cuatro o cinco centavos, según las zonas".


El segmento perjudicado
El impacto del ajuste sobre el precio del GNC afecta a una parte menor pero creciente del parque automotor del país, ya que a partir del diferencial de precios que se generó con el incremento de los valores de la nafta tras la devaluación se convirtieron cerca de 1,3 millones de unidades.

Cameron precisó: "Tenemos 1.300.000 unidades a GNC, de las que 125 mil son transporte público (taxis), unas 400 mil, pick ups, de las que entre un 20 y 30 por ciento cumplen funciones de taxi flete u otra actividad productiva, y 800 mil unidades son absolutamente privadas".

El funcionario quiso mostrar así que las dos terceras partes de las unidades accionadas a GNC, no están destinadas al transporte público de pasajeros o actividades productivas.

Por su parte, Fridman dijo que esperaban este aumento "porque todos sabemos que el precio del gas en boca de pozo está absolutamente devaluado".

En la venta al usuario "implicara un aumento de entre 5 y 10 centavos" dependiendo de la ubicación de la boca de expendio, pero Fridman consideró que no afectará los resultados de las mismas.

"Sigue siendo tres veces más barato que los otros combustibles y a diario se suman nuevos vehículos convertidos", reseñó el empresario.

Las refinadoras nucleadas en la Cámara de la Industria del Petróleo (CIP), reclaman desde hace tiempo una corrección del precio del GNC, por considerar que este distorsionó el mercado y provocó una caída vertiginosa en la venta de combustibles líquidos luego de que la nafta, que tiene un precio desregulado, incrementara significativamente el valor de surtidor.

El presidente de la CIP, Juan José Aranguren reclamó en varias oportunidades un incremento del precio del gas en boca de pozo como mecanismo para comenzar a recuperar el sector. Sin embargo, fuentes del sector señalaron que el incremento no alcanza para reducir la distorsión que se produce en el mercado, ya que pese al aumento anunciado ayer mantiene una amplia brecha entre el precio de un litro de nafta super a un promedio de 1,80 pesos y los 0,50 pesos que cuesta el metro cúbico de GNC.

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En Rosario se agrega la tasa municipal de 10,6%.

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