Fuera de foco

Sebastián Mazzoni: "Aprender no tiene límites"

El cantante dijo que a nivel académico Rosario tiene lo mejor

-¿En qué consiste la beca?

-Es para cursar dos meses en la Academia de Comedia Musical Youkali. Quedé seleccionado entre diez personas. Ellos se hacen cargo de todo, menos del pasaje, que lo paga la Fundación Rosario Arte y Cultura, que depende del Estudio de Comedias Musicales.

-¿Existe la posibilidad de que te quedes?

-Me preguntaron si estaba abierto a una posibilidad de trabajar allá. Obviamente dije que sí, así que podría trabajar en un teatro los jueves a la noche. También me sugirieron si iba abierto a alguna contratación. Pero no me quiero hacer la cabeza con quedarme porque acá estoy bien, tengo trabajo en lo mío como docente y artista. No voy con esa idea.

-¿Hay algún límite para aprender canto?

-Las ganas. En mi caso empecé a los 18 años y no hay límites para aprender. Si tenés el don natural de la voz es más fácil, pero con la técnica lo que no es del todo adecuado se corrige y hasta afinación es una materia.

-¿Y a nivel de enseñanza en Rosario?

-Creo que no. A nivel académico Rosario tiene lo mejor. Yo tuve la suerte de tener profesores excelentes. Hace once años que estudio acá y siempre te pica por estudiar en otros lugares. Yo estudié periodismo y estoy estudiando fonoaudiología. Creo que pasa en todas las profesiones. Está bueno probar, exprimir Rosario y después ver si se da para irse.

-¿Cómo surge tu vocación?

-Era muy tímido y sólo cantaba en el baño. Mi hermano estudiaba canto con Rosa Bonino y casi me obligó a ir con ella, de allí, al Estudio de Comedias Musicales y de ahí a Graciela Mozzoni. Mi mamá era maestra de piano, pero excepto un hermano, el resto, incluido mi papá, no eran muy buenos. O sea que el ambiente musical lo viví, aunque no fue de lo mejorcito (risas).

-¿Qué significó "Robin Hood"?

-Me dio muchas posibilidades, como trabajar con Alejandro Dolina en "Lo que me costó el amor de Laura", ahí me vieron y trabajé en una obra para el gobierno de de la ciudad de Buenos Aires, de ahí salté a "Carta de un general", que recibió un premio Estrella de Mar. Fui haciendo escalas y después tuve la suerte de trabajar en "Siglo XX música de oro".

-¿En qué situación está el musical con respecto a la producción nacional?

-Creo que empezó a revalorizarse el musical argentino. Hoy es muy costoso traer algo de afuera y se tomó mucho coraje en hacer producciones locales. Ya no se ve como un mercado meramente pasatista, sino que hoy el cantante se puede desarrollar en todas las áreas y Rosario está teniendo unos artistas muy completos en ese sentido.

-¿El público lo valora?

-Los rosarinos mucho, pero pasa algo extraño cuando nos ven extranjeros. Por ejemplo, el show "Una noche de película" lo ven artistas y gente de todo el mundo, y muchas veces preguntan si los cantantes son de Buenos Aires o si hacen playback. Es incómodo porque somos de la ciudad, estudiamos y trabajamos acá.

Sebastián Mazzoni ganó una beca para perfeccionarse en Barcelona.