De 814: Muere Carlomagno, creador del Sacro Imperio Romano

Guillermo Zinny / La Capital

El emperador Carlomagno nació en Aquisgrán, en la actual Francia, el 2 abril de 742, y era hijo del rey franco Pipino el Breve y hermano de Carlomán. Cuando Pipino murió en 768 el gobierno de sus reinos fue compartido entre sus dos hijos. Carlomagno buscó una alianza con los lombardos al casarse en el 770 con la hija del rey Desiderio, pero al año siguiente repudió a su esposa y cuando el papa Adriano I pidió su ayuda contra Desiderio, el rey franco invadió Italia, derrocó a su antiguo suegro (772) y asumió el título real. Entonces viajó a Roma y reafirmó la promesa de su padre de proteger las tierras papales. En el año 774 combatió las incursiones de los sajones en su territorio, y en 775 se embarcó en una campaña para conquistarlos y cristianizarlos. La misma se alargó por treinta años, y su frente de batalla se extendió hasta la península ibérica. Precisamente regresaba de Iberia cuando sus ejércitos de retaguardia fueron emboscados. Esta acción fue inmortalizada en "La canción de Roland", jefe del ejército atacado. Sometió luego a los bávaros y conquistó el territorio de los ávaros, el que corresponde a las actuales Hungría y Austria. En las campañas contra los sajones impuso el bautismo por la fuerza y se deshizo de los rebeldes con matanzas sin piedad. Construyó así de hecho un imperio, por lo que en la Navidad del 800 fue coronado por el Papa León III en la basílica de San Pedro, en Roma, como el gran y pacífico emperador de los romanos. Durante su reinado todo su poder lo puso al servicio de la fe cristiana: fomentó las vocaciones religiosas e implantó el uso del latín como lengua principal del imperio. Fusionó la cultura germana, romana y cristiana, creando así la posterior plataforma de nuestra civilización. Carlomagno estableció su residencia en Aquisgrán, donde reunió eruditos de toda Europa. Ya en la década de 790 su imperio comenzó a sufrir las primeras y temibles incursiones de los vikingos, por lo que debió ordenar una especial vigilancia en cada puerto, pero con escasa efectividad. Murió el 28 de enero de 814, antes de que la completa y destructiva fuerza de los vikingos se desatara sobre el territorio imperial.