Colombia pide ayuda al mundo por el terrorismo

Madrid.- El vicepresidente de Colombia, Francisco Santos, instó ayer a la comunidad internacional a cambiar la percepción sobre el fenómeno terrorista en su país y a prestarle ayuda para "sacar de la oscuridad" a las miles de víctimas colombianas del terrorismo. Santos hizo esas consideraciones durante su intervención en el Primer Congreso Internacional sobre Víctimas del Terrorismo, que comenzó anteayer en la localidad madrileña de Boadilla del Monte.

La comunidad internacional debe tener una "mirada justa" con Colombia, donde las víctimas del terrorismo reciben la solidaridad "a cuentagotas por parte de quienes sólo ven un lado de la violencia", dijo Santos. La comunidad internacional debe cambiar "la percepción simplista, muchas veces manipulada o miope, que se tiene de nuestro país", instó el vicepresidente colombiano.

"Este viraje comienza por superar de una vez por todas el debate acerca de si los grupos armados ilegales de Colombia apelan o no al terrorismo", dijo. Las evidencias "no dejan lugar a dudas", dijo refiriéndose a las Farc y el ELN.

Por otra parte, la Organización de Estados Americanos (OEA) recibió el respaldo de la comunidad internacional para realizar la verificación del proceso de paz entre el gobierno de Colombia y los paramilitares, tras haber dirimido un enfrentamiento con la ONU en torno a esa misión.

El apoyo fue expresado al secretario general de la OEA, César Gaviria, ayer durante una encuentro la víspera con los embajadores de los Estados miembro del organismo, convocado de urgencia a raíz de la polémica.

Con el fin de encontrar también respaldo en la Unión Europea (UE), que cuestiona el proceso con los paramilitares, Gaviria se encontraba ayer reunido con los embajadores europeos acreditados en este país, en la sede de la Cancillería, en Bogotá.

En "esa tarea que nos ha pedido el gobierno que asumamos. Veremos cómo pueden los países cooperar para el éxito de esta misión que es muy importante", declaró el representante de la OEA, presidente de Colombia de 1990 a 1994.

La controversia se desató luego de que Gaviria responsabilizara al enviado especial de la ONU para Colombia, James Lemoyne, de haber afirmado que varios países de la OEA y la UE estaban indignados porque firmó el viernes con el presidente Alvaro Uribe el acuerdo que formalizó la verificación del plan de paz con los grupos de ultraderecha.

"Ningún embajador dijo que estuviera inconforme con el convenio", afirmó Gaviria, quien además señaló que las dudas que tiene la comunidad internacional sobre el proceso, principalmente por el temor a que queden impunes crímenes atribuidos a los paramilitares, no ameritan que se paralice la desmovilización de éstos. (AFP y DPA)