| domingo, 25 de enero de 2004 | Parmalat, "obra maestra de la estafa" Así calificó el caso el premier Silvio Berlusconi. El oscuro papel de bancos y agencias calificadoras Maurice Lubatti Milán. - La investigación sobre la quiebra del grupo agroalimentario multinacional Parmalat puso al descubierto una serie de fallas en los sistemas de control, que son el fundamento de la confianza entre el ahorro público y las empresas.
Este desastre financiero, estimado entre 10 y 14 millardos de euros, es la prueba de la falta de seriedad de los bancos y de los organismos encargados de verificar las cuentas. La investigación puso en evidencia las mentiras deliberadas de antiguos responsables de Parmalat con el apoyo de documentos falsos.
Muy buen conocedor de los secretos de la gestión de las grandes empresas, ya que él mismo controla un grupo de comunicación muy poderoso, el presidente del Consejo de Gobierno italiano Silvio Berlusconi calificó el caso Parmalat de "mala fe genial" que ha creado una "obra maestra en el arte de la estafa".
Deutsche Bank salió a tiempo Los jueces de Milán y de Parma, que intentan desmontar el engranaje de esta estafa gigantesca, están llevando a cabo varias indagaciones que les han conducido a investigar al Bank of America, Nextra (grupo Banca Intesa), Morgan Stanley, Standard and Poor's y el Deutsche Bank.
En este último banco los jueces están investigando la sorprendente reducción de la participación del banco alemán en el grupo Parmalat, que pasó de 5,1% en noviembre pasado a tan sólo 1,5% algunos días más tarde. Los investigadores quieren saber si el banco benefició de información privilegiada sobre la inminencia de la bancarrota.
Según varias informaciones aparecidas en la prensa, la Justicia italiana está investigando también un importante préstamo en obligaciones de 350 millones de euros emitido por el Deutsche Bank en setiembre del 2003 a cuenta a Parmalat. Se trata de saber si, en esa época, el banco tenía conocimiento de las dificultades financieras de Parmalat y si disimuló la información para promocionar estas obligaciones.
Once antiguos responsables de la gestión de Parmalat, entre los cuales hay dos auditores del gabinete Grant Thornton y un abogado, están en prisión acusados, entre otras cosas, de falseamiento contable, estafa y malversación de fondos. El fundador de la empresa, Calisto Tanzi, también figura entre los detenidos.
Durante varios meses la antigua dirección de Parmalat dijo tener un depósito de 3.950 millones de euros en una cuenta del Bank of America en las islas Caimán, lo que al final se reveló totalmente falso. Según un especialista que desea mantener el anonimato, antes de firmar el balance de una empresa que dice tener una cuenta de este tipo, el auditor pide normalmente una confirmación directa al banco para comprobar su existencia. ¿Cómo es posible entonces, afirma este especialista, que un auditoría haya podido creer que Parmalat tenía un depósito de esta cantidad en un solo banco, cuando el grupo trabajaba con muchos bancos a la vez? La auditora se conformaba con un fax, burdamente falseado que incluía el logotipo del Bank of America, en que se "certificaba" la existencia de esa enorme cantidad de dinero.
"Tango bonds" Las consecuencias del caso Parmalat, que estalló tras la quiebra, en julio del 2003, del grupo Cirio, otra gran empresa del sector agroalimentario italiano, y tras el escándalo de los "tango bonds", las obligaciones argentinas que fueron congeladas por el default argentino, está acabando con la confianza de los ahorristas italianos.Los bancos son acusados de haber engañado a sus clientes recomendando suscribir bonos que ya no tienen ningún valor. (AFP) enviar nota por e-mail | | Fotos | | Un depósito de la planta madre de Parmalat en Collecchio. | | |