| domingo, 18 de enero de 2004 | Implantaron un embrión humano clonado Lo anunció ayer en Gran Bretaña el especialista Panos Zavos, y levantó una fuerte controversia científica Un experto independiente que vive en Estados Unidos, Panos Zavos, dijo ayer que había implantado un embrión humano clonado en el útero de una mujer provocando una fuerte reacción en el mundo. Algunos expertos se mostraron escépticos al escuchar la declaración de Zavos, quien aseguró que estaba esperando para comprobar si el implante, que se realizó en un lugar aún desconocido, había resultado satisfactorio.
"Transferimos el primer embrión clonado a una mujer de 35 años. Como aún no han pasado dos semanas desde la transferencia del embrión, estamos esperando a ver si está embarazada", dijo en una conferencia de prensa en Londres.
Su sorprende anuncio fue criticado inmediatamente por el gobierno británico, que señaló que esta práctica es ilegal en ese país. "Nos comprometimos a impedir que esto pasara en el Reino Unido y actuamos rápidamente para cumplir con el compromiso aprobando el Acta de Clonación Reproductora Humana a finales del 2001", dijo el secretario de Salud, John Reid.
El acta "prohíbe específicamente cualquier intento de clonar un bebé en el Reino Unido. También estamos trabajando para lograr una prohibición mundial de la clonación reproductora a través de las Naciones Unidas", agregó.
Otros expresaron su escepticismo. "No es la primera vez que el doctor Zavos ha hecho declaraciones sin presentar ninguna evidencia para sustentarlas", dijo Patrick Cusworth, del grupo contra los abortos, Life.
"Life, como organización, acogería la última declaración del doctor Zavos con cierto escepticismo", comentó. "Sin embargo, si lo que dice el doctor Zavos es cierto, diría que ha expuesto a esta mujer de 35 años a un riesgo casi increíble", añadió.
Asimismo, el Vaticano condenó la práctica. El vicepresidente de la Academia Pontificia para la Vida del Vaticano y ex director del Instituto de Bioética del Colegio Médico Sagrado Corazón, monseñor Elio Sgreccia, describió la práctica de Zavos como "una ofensa para los seres humanos".
"Parece que todos comparten la posición moral, no sólo la posición de la Iglesia", dijo. "Ahora tenemos que ver lo que harán las autoridades políticas".
Zavos dijo que el embrión que había implantado en la mujer, cuya identidad no fue revelada y estaba experimentando una menopausia prematura, se había desarrollado a partir de un óvulo de ella misma fertilizado con ADN extraído de células de la piel donadas por su esposo infértil.
Zavos explicó que las células de la piel se transformaron en un tipo de células que se fusionaron con el óvulo. "Después, ocurrió la fusión y la activación (celular). El embrión comenzó a desarrollarse adecuadamente. Se veía como un embrión muy saludable. Decidimos, con el consentimiento de la paciente, transferir dicho embrión (al útero de la mujer) y así lo hicimos", indicó.
"Nos sentimos muy optimistas de que los resultados serán satisfactorios", dijo Zavos.
Sin embargo, admitió que las probabilidades de que el embarazo llegue a su término son escasas, pero agregó que seguiría intentándolo hasta que tuviera éxito en esta práctica. (Reuters) enviar nota por e-mail | | Fotos | | Zavos, en Londres. El gobierno de la isla recordó su adversión a esas experiencias. | | |