| sábado, 17 de enero de 2004 | La Cancillería salió al cruce del reclamo por los 80 desaparecidos uruguayos El gobierno argentino redobló las críticas contra el presidente Batlle Aníbal Fernández calificó como "vergonzosos" los dichos del mandatario. Aclaración de la Justicia El gobierno nacional redobló su apuesta en la polémica que mantiene con Uruguay e instó ayer al presidente de ese país, Jorge Batlle, "a colaborar en forma activa en el esclarecimiento y en la búsqueda de la verdad" en relación con los desaparecidos de ambos Estados durante el último período de las dictaduras militares en el Cono Sur.
A través de un comunicado, la Cancillería salió al cruce del reclamo de Batlle por los "80 uruguayos desaparecidos en la Argentina", brindando información detallada acerca de los casos de ciudadanos de ese país, víctimas del último régimen militar argentino, que obra en su poder. "La política de derechos humanos en la Argentina es un pilar de la gestión del presidente Néstor Kirchner, quién además ha definido el caso Gelman como una cuestión de Estado", sentenció el Palacio San Martín.
Tras destacar que pese a las leyes del perdón "la sociedad argentina nunca se dejó de investigar el destino de los desaparecidos (adultos y niños) ni la identidad de los cuerpos hallados NN, sin importar la nacionalidad", la Cancillería marcó las diferencias con la política adoptada en Uruguay en materia de derechos humanos.
"La Argentina siempre estuvo activa en la investigación y no existió aquí ninguna ley de caducidad que nos hiciera bajar los brazos. Como así también, siempre estuvo abierta la puerta para nuestros hermanos uruguayos que buscaban a su familiares en la Argentina y para los organismos uruguayos que solicitaban información", se destacó.
Por último, la cartera que conduce Rafael Bielsa consideró que "los uruguayos desaparecidos en Argentina no fueron víctimas sólo de los miembros de fuerzas de este país sino también de las Fuerzas Armadas y de seguridad de Uruguay que intervinieron en forma activa en la desaparición y tortura".
Por la mañana, el ministro del Interior, Aníbal Fernández, calificó como "una vergüenza" que Batlle reclame ahora por los 80 connacionales desaparecidos e insistió que el gobierno de Kirchner seguirá "hinchando" para que se investigue y se conozca la verdad sobre el secuestro y desaparición de la nuera del poeta argentino Juan Gelman, María Claudia Irureta Goyena, ocurrido en 1976.
María Claudia, fue secuestrada junto con su esposo Marcelo Gelman en Buenos Aires y trasladada luego a Montevideo, donde dio a luz en un centro clandestino y su hija fue entregada a una familia uruguaya que la anotó como hija propia.
Ante la falta de respuesta de Uruguay, el secretario de Derechos Humanos, Eduardo Luis Duhalde, solicitó al juez federal Claudio Bonadío que cite a prestar declaración testimonial a un grupo de militares y policías orientales vinculados con la desaparición de María Claudia.
En respuesta a ello, el mandatario uruguayo declaró el jueves que le parece "muy grave que estemos preocupados nada más por un caso (en relación a la causa Gelman) y nos olvidemos de los 80 uruguayos o más desaparecidos en la Argentina".
El Jefe del Estado uruguayo también anticipó el pedido a su colega argentino para que investigue e informe sobre sus connacionales que fueron detenidos y desaparecidos en la Argentina durante la última dictadura militar.
Como consecuencia de ello y en un nuevo capítulo de la escalada de cruces entre la Argentina y Uruguay, la Cancillería a cargo de Rafael Bielsa invitó "de manera expresa" a Batlle "a colaborar y participar en forma activa en el esclarecimiento y en la búsqueda de la verdad".
Identificación En tanto, la Justicia argentina también replicó al mandatario del país vecino al informar que se identificó a ocho de esas víctimas, advirtiendo al mismo tiempo que "esa búsqueda nunca tuvo una orientación determinada por nacionalidad".
El ministro del Interior, a su vez, sostuvo que "nos importan los argentinos y los uruguayos. Lo que es una vergüenza es que el presidente se acuerde unos cuantos años después (cuando) la ley de obediencia debida, la de punto final, fueron sepultando esas acciones e impidiendo a las familias saber exactamente qué había sucedido".
Fernández dijo que para la administración nacional "no es un vuelto" el reclamo del mandatario uruguayo y aclaró que "nosotros vamos a seguir hinchando con el caso de la nuera de Juan Gelman y vamos a seguir hinchando (sic) por los 80 desaparecidos uruguayos en Argentina". enviar nota por e-mail | | Fotos | | El mandatario uruguayo y su par argentino tratan de disimular su pésima relación. | | |