| sábado, 10 de enero de 2004 | Reflexiones Pasada la tormenta, UE y judíos luchan juntos contra el antisemitismo Thomas P. Spieker No todos creían lo que estaban viendo. ¿Se abrazaban realmente el secretario general del Congreso Judío Mundial, Israel Singer, y el presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi? ¿Habían asegurado en la pequeña sala de prensa en Bruselas que se tienen una absoluta confianza desde hace mucho tiempo? ¿Las fuertes acusaciones de los últimos días eran sólo una tormenta en un vaso de agua?
"Culpable de antisemitismo por acción y omisión", afirmaba un artículo de prensa del lunes pasado del presidente del Consejo Judío Mundial, Edgar Bronfman, y del Consejo Judío Europeo, Cobi Benatoff.
En su opinión, la comisión hizo pública una encuesta "sediciosa" en la que Israel es visto como el enemigo principal de la paz mundial. Y en cambio censuró un estudio según el cual cada vez hay más musulmanes implicados en ataques antisemitas en Europa como represalia por las acciones israelíes hacia los palestinos.
La condena de Bronfman y Benatoff fue un fuerte golpe para Prodi, que estaba organizando un seminario sobre antisemitismo con judíos europeos. Y es que ni Prodi ni la Comisión defendieron nunca como propios los polémicos sondeos.
La encuesta de Eurostat, que muchos consideran algo tonta, es uno de los numerosos "eurobarómetros" que ocupan a la oficina de estadística, envuelta además en un escándalo financiero. Bruselas no tiene influencia sobre los resultados.
Por su parte, el Centro de Observación sobre Racismo y Xenofobia de Viena recibe fondos de la UE, pero no así lineamientos acerca de cómo trabajar.
Prodi explicó estos extremos a los representantes judíos, a quienes consultó varias veces después de que se dieran a conocer las investigaciones.
Durante tres horas hubo reuniones además en Bruselas para acordar los contenidos del seminario conjunto para luchar contra el antisemitismo, señaló el presidente el martes durante un viaje a Dublín. "Estaban incluso entusiasmados. Y luego leí ese artículo (de Bronfman y Benatoff). No me lo explico".
Tampoco dio una explicación al respecto Singer, que viajó a Bruselas como embajador de Bronfman. Al ser interrogado rechazó la pregunta y dijo que no se trata del artículo, sino de combatir el antisemitismo, algo que se propone hacer la Comisión.
No será tarea fácil. En algunos países europeos hay gran cantidad de población musulmana en la que está creciendo el problema, ya no sólo exclusivo de la extrema derecha.
Los gobiernos afectados no desean sin embargo una confrontación con sus ciudadanos musulmanes, por lo que quieren actuar con cautela.
Es difícil hacer diferenciaciones cuando se extienden el odio hacia los judíos y caldea los ánimos la idea de una supuesta "conspiración mundial judía". O cuando, en el otro extremo, toda crítica a Israel es considerada como antisemita.
Hay muchos temas importantes para abordar en el seminario que Prodi ha dicho ahora que seguirá organizando con las organizaciones judías, luego de que a la condena siguiera la absolución. "Si hay un hombre en el que confiamos cuando se trata de la seguridad de las minorías y sobre todo de los judíos en Europa, ese es el presidente Prodi", aseguró Singer. enviar nota por e-mail | | |