Apuntan a tres bandas por el secuestro de Rodríguez

El gobierno reiteró ayer a través del jefe de Gabinete, Alberto Fernández, su preocupación por el secuestro del padre del empresario Jorge "Corcho" Rodríguez, mientras los investigadores del caso tienen a tres bandas en la mira, informaron fuentes allegadas a la investigación.

Fernández dijo ayer que el secuestro del padre de Rodríguez "se está dilatando más de lo esperado", por lo que, dijo, le planteó al empresario que cuente con la ayuda del gobierno. "Es un caso que se está dilatando más de lo que uno esperaba y básicamente lo que le planteamos a Jorge Rodríguez es que cuente con el Gobierno si en algo puede ayudar", manifestó Fernández.

El funcionario explicó que el caso es investigado por la Policía Federal y la Justicia federal y advirtió que "hay que ser cautos y ver cómo evoluciona".

El propio presidente Néstor Kirchner se preocupó desde el inicio del cautiverio por la suerte de Rodríguez, lo mismo que el gobernador bonaerense Felipe Solá.

En tanto, los investigadores del caso sospechan de "tres grandes bandas" que con antecedentes en secuestros extorsivos pueden ser quienes tengan en cautiverio hace 18 días a Ernesto Rodríguez. Pero, los investigadores prefirieron no develar qué secuestros cometieron estos delincuentes.

Por otra parte, no se descarta que para concretar el secuestro de Rodríguez se hayan unido distintas células de estas tres bandas. "Podría ser gente que no quedó libre de otros delitos y ahora estén trabajando en conjunto", comentaron. Es que las bandas organizadas que cometen secuestros extorsivos generalmente actúan divididas en distintas células que se reparten los roles y que muchas veces ni se conocen entre ellos y el único eslabón en común es el cerebro de la organización.


"No creemos que esté muerto"
Ante versiones periodísticas en cuanto a que los familiares temen por la vida del hombre de 74 años y con problemas cardíacos, la fuente consultada descartó: "Ni por lejos creemos que esté muerto".

El ministro de Seguridad bonaerense, Raúl Rivara, ya confirmó el martes último que hubo una prueba de vida. Oficialmente, los investigadores judiciales y policiales mantienen el hermetismo en torno al caso y algunos inclusive siguen afirmando que sólo hubo un contacto telefónico, el del inicio del secuestro, el 23 de diciembre. (Télam)