Otro caso aberrante en la localidad de San Carlos Centro

Un joven de 25 años y un sexagenario fueron detenidos ayer en la ciudad santafesina de San Carlos Centro, 40 kilómetros al oeste de la ciudad de Santa Fe, acusados de violar a una niña de 12 años que quedó embarazada, indicaron fuentes policiales.

El más joven de los detenidos es el hermano de la menor, mientras el otro, un hombre de 62 años, no tiene lazos de parentesco con la víctima, agregaron las fuentes.

El hecho fue descubierto cuando la niña concurrió a un hospital de San Carlos Centro, donde presentó a los médicos un test de embarazo positivo, por lo que los facultativos dieron inmediato aviso a la policía.

Una vez tomado conocimiento del caso, agentes policiales iniciaron una investigación que determinó que la niña era violada desde los 9 años de edad por su hermano mayor, y que luego fue sometida por otro hombre de 62 años, conocido del joven.

La policía detuvo ayer al muchacho y al sexagenario -cuyas identidades no trascendieron- quienes quedaron a disposición de la Justicia, acusados de violaciones reiteradas.

En tanto, voceros policiales indicaron que el estado de salud de la niña es bueno, aunque se encuentra bajo observación médica debido a su embarazo, con conocimiento del Juzgado de Menores Nº 1 de Santa Fe. También interviene en el hecho el Juzgado de Instrucción en turno de la 4ª Nominación, a cargo de Rubén Saurí.

Los hermanos son de condición humilde y viven con su madre en San Carlos Centro. El hermano y la madre de la niña trabajaban en su finca realizando artesanías.

A su vez, el sexagenario -de mejor condición económica- reside en otro lugar, apartado, y en estos momentos se encontraría desocupado. La policía intenta determinar si a cambio de la entrega de la menor, el hombre habría hecho alguna clase de pago.

Personal policial de la Unidad Regional XI, con sede en Esperanza, tomó conocimiento del hecho luego de que días atrás profesionales médicos del hospital público Suchón, de San Carlos, atendieran a la niña quien concurrió al hospital acompañada por su madre y entregó un test de embarazo con resultado positivo.

La niña se hizo atender a instancias de la madre, quien había ignorado los gravísimos padecimientos a que era sometida su hija, aunque por distintos motivos en el último tiempo comenzó a sospechar de la existencia de una situación anómala.