Concientización sobre los trastornos del sueño

En el marco de la campaña se habilitó una página web para consultas

Muchos padecen trastornos del sueño y no consultan al médico. Algunos por falta de información sumado a la creencia que es algo normal que le sucede a muchos. Esto los lleva a tolerar algunas manifestaciones del mal dormir, como la somnoliencia diurna, los ronquidos, la apnea, los terrores nocturnos, la inquietud en las piernas y el sonambulismo. Sin embargo, estos problemas tienen solución con un tratamiento adecuado. Para brindar información sobre el tema se está desarrollando hasta el lunes próximo la Campaña Nacional de Concientización sobre los Trastornos del Sueño, organizada por la Asociación Argentina de Medicina del Sueño, entidad sin fines de lucro creada en 1995.

Las consultas pueden hacerse a través de la habilitación de una página web (www.aamsue.com.ar). Quienes deseen más información pueden escribir al e-mail: [email protected]. Los que quieran consultar por teléfono lo pueden hacer a través del (011) 154-0360963.

"La página web ofrece un cuestionario de autoevaluación para que las personas se fijen si realmente son víctimas de los trastornos del sueño. De acuerdo a los resultados verán si necesitan una consulta médica. El objetivo es que la población tome conciencia sobre el problema y evite sus consecuencias", explicó el doctor Norberto Kriguer, médico neurólogo y presidente de la Asociación Argentina de Medicina del Sueño.

Una de las principales consecuencias del mal dormir, cuando no es adecuadamente tratado, es el trastorno en la memoria, que lleva a un bajo rendimiento laboral. Y cuando el problema se hace crónico, puede llegar a provocar alteraciones en el nivel hormonal o en la inmunidad, y enfermedades como la hipertensión arterial, entre otras.

Durante situaciones de crisis donde la ansiedad y el estrés son elevados, es habitual que mucha gente experimente por primera vez alteraciones del sueño o agrave las ya existentes. Estas pueden manifestarse durante la noche a través de la dificultad para iniciar el sueño, despertares frecuentes, y sensación de sueño no reparador durante el día en forma de somnolencia y fatiga.

Según Kriguer no sólo hace falta informar sobre el trastorno a la población en general, sino también a los médicos. Para ello, pasado mañana y el sábado, en la ciudad de Córdoba, se llevarán a cabo unas jornadas sobre medicina del sueño, dirigidas a profesionales de la salud.


Sueño y estrés
En momentos críticos es necesario más que nunca un buen descanso nocturno que otorgue energía y claridad mental para afrontar el nuevo día. Dormir es una actividad absolutamente necesaria e irremplazable; es el único mecanismo del que dispone nuestro cerebro para recuperarse. Sobre este aspecto, la Asociación Argentina de Medicina del Sueño recomienda:

u Mantener horarios regulares de sueño, tanto al acostarse como al levantarse. El cerebro está preparado para conciliar el sueño entre las 24 y la 1. Más tarde costará dormirse. Esto incluye a los niños, aunque estén de vacaciones.

* Hacer algún ejercicio suave durante el día ayuda a la relajación necesaria antes del sueño. Preferentemente al medio día o media tarde, aunque sólo sea salir a caminar.

* Reducir o suprimir la cafeína (presente en el café, té, mate, chocolate, bebidas cola), a partir de las 16. La cafeína no sólo atrasa la llegada del sueño, sino que provoca despertares nocturnos.

* Evitar que los niños consuman bebidas colas por la noche por su alto contenido en cafeína.

* Limitar o evitar el alcohol después de las 16. No ayuda a dormir, por el contrario impide el sueño profundo.

* Evitar mirar televisión antes de dormir y nunca hacerlo desde la cama. No se resolverá nada mirando las noticias hasta las 24.

* Cortar después de la cena y dedicar ese tiempo a la familia y amigos. Intentar conversar o jugar con los hijos, leer un libro, escuchar música suave.

* Las pesadillas suelen incrementarse en situaciones de crisis o estrés especialmente en los niños pequeños. Intente tranquilizarlos y reafirmar el hecho de que es sólo un mal sueño.

* Ayuda a minimizar las pesadillas de los niños cambiar la TV nocturna y los juegos violentos de los videos por la lectura de un cuento o el relato de una historia tranquilizadora antes de dormir.

* Apartar los problemas a la hora de dormir. La cama no es el sitio más adecuado para pensar en los problemas y angustiarse. Dar lugar a un sueño reparador.

* No automedicarse.

* Si persisten los síntomas más de una semana consultar al médico de cabecera o recurrir a un especialista en medicina del sueño.

Para descansar existen algunos consejos.