| miércoles, 10 de diciembre de 2003 | Un poco de sentido común Con esta carta deseaba contestar a la que publicó Eduardo Rodríguez Bonel el pasado 2 de diciembre, titulada "Según cuenta la leyenda". Primero quiero hacer una observación: la carta parece escrita -lo digo con total respeto- por una persona resentida contra la Iglesia Católica por problemas personales o tal vez por alguien que no profundizó lo suficiente en los temas que trata en su artículo. Pues la Iglesia pidió perdón por los abusos, pero hay muchas calumnias en los temas tales como la Inquisición. En el tema de Galileo hay una mala interpretación de los hechos: la Iglesia pensaba que el heliocentrismo era contrario a la Biblia pero fueron los teólogos los que dictaminaron el carácter herético de esta teoría. Podía, también, esta teoría -que no estaba científicamente comprobada- generar grandes problemas sociales en aquella época; por tanto, la Iglesia debía cuidar mucho su doctrina. Además querría agregar que hay una especie de crítica sistemática a los católicos cuando otras religiones también tuvieron tales abusos, y a veces peores. Y en lo que respecta al aborto y a la salud reproductiva, la Iglesia utiliza principalmente fundamentos científicos -que el hombre es hombre desde la concepción no es un dogma, pregúnteselo al prestigioso médico yanqui que tenía la clínica abortista más grande del mundo y luego dejó de practicarlo por autoconvencimiento-, y si no son aceptados, es por la cerrazón de muchas personas. Y aun en el caso en que se dudase de cuándo el hombre es hombre, al menos por prudencia debería prohibirse el aborto. La Iglesia lo que pretende es que se respete la dignidad humana.
DNI 32.290.081
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