| lunes, 08 de diciembre de 2003 | Brasil sigue siendo una tentación, pero los precios de sus playas desalientan Ayer volvió el primer charter Rosario-Florianópolis. Loque más rescataron los viajeros fue el vuelo directo Poco antes de las 15 de ayer, el avión de Southern Winds con capacidad para 120 pasajeros aterrizó en el Aeropuerto Internacional Rosario procedente de Florianópolis. De los viajeros, 59 desembarcaron en la ciudad y otros 60 siguieron a Córdoba, después de pasar por Migraciones y la Aduana en la terminal local. Mieleros, parejas mayores, alguna que otra familia con chicos y un grupo de agentes turísticos dialogaron con La Capital, que fue a recibirlos como los primeros turistas del vuelo directo a Brasil en esta temporada. La mayoría volvió feliz, con cara relajada y señales de que el sol brilló en las playas. Pero hubo una queja repetida: no fue barato. Y si bien, como era un charter, la mayor parte de las vacaciones ya estaba paga, los viajeros dejaron claro que el que elija como destino a Brasil no debe ilusionarse con ninguna ganga.
"Mirá, comer algo sencillo para dos no baja de los 30 pesos y por una bermuda de jean nos pidieron 160 pesos, así que mejor ir preparados", ilustraron Javier y Telma, dos recién casados que eligieron Camboriú para su viaje de bodas. Algunos pasajeros afirmaron que Brasil está "carísimo" y otros, "apenas un poco más caro". De cualquier modo, se vieron pocas bolsas de Lojas Americanas, la otrora irresistible tienda de Florianópolis para los compatriotas más ávidos.
Comparar los precios nacionales en materia turística con los que se piden en Brasil ya es casi un deporte de verano, alimentada por años de ventaja comparativa para los viajeros argentinos. Sin embargo, la devaluación del peso se encargó de que el déme dos pasara al recuerdo, aunque la propia depreciación del real haya recuperado luego a las playas vecinas como opción. Después de todo, los precios nacionales para la próxima temporada tampoco prometen clemencia.
Pero no todo se mide en pesos. La mayoría de los pasajeros consultados dijo que el viaje había sido "bárbaro" y algunos hasta se animaron a ponerle "un 10". Los destinos incluyeron Florianópolis, Camboriú, Bombinhas y Laguna, todas localidades del sur brasileño.
Desde el grupo de agentes de viaje que voló en plan de "reconocimiento" llovieron elogios a la organización del charter, sobre todo por la ventaja de partir directo desde Rosario. Aclararon, incluso, que en Fisherton embarcan pasajeros de otras ciudades y provincias.
No fueron los únicos en destacarlo. "Ojalá dure, porque cuando los vuelos salían regularmente de acá solíamos viajar a Camboriú dos o tres veces al año", sostuvo Nélida. Y su opinión despertó ecos de acuerdo entre otros pasajeros. enviar nota por e-mail | | Fotos | | El primer vuelo de Southern Winds en Fisheron. | | |