| domingo, 07 de diciembre de 2003 | Tres al hilo Central Córdoba prolongó su racha de triunfos ante Brown Domingo Celsi / Ovación Córdoba no gusta, pero gana. Aunque el equipo de Tablada está bastante lejos del ideal futbolístico, al menos alimenta su ego con victorias y esto no es poco si se tiene en cuenta que en este Apertura los charrúas sufrieron más de lo que gozaron y que por un buen tiempo fueron uno de los peores equipos del torneo.
Pero ahora, cuando todavía quedan tres fechas por delante, los dirigidos por Lito Isabella comienzan a disfrutar de las mieles del éxito y sus hinchas ya piensan que en un futuro próximo este equipo vuelva a darle satisfacciones.
Como en el fútbol los resultados mandan, más uno de los simpatizantes que ayer se cansaron de insultar a algunos jugadores y de recriminarle a Isabella los ingresos de Ferreya y Pignatta -a la postre los responsables de la victoria charrúa- seguramente ya archivaron sus críticas hasta el próximo partido porque la victoria todo lo tapa.
Sin embargo, Isabella y sus dirigidos saben que si bien esta racha de triunfos les permite trabajar mucho más tranquilos, Córdoba todavía tiene mucho camino por recorrer antes de convertirse en un equipo sólido y con aspiraciones serias de meterse en la pelea por el ascenso. Y ante Brown esto quedó en evidencia.
Frente a un equipo que cierra la tabla de posiciones y con serios problemas para permanecer en la categoría, Córdoba tuvo demasiados inconvenientes para quebrarlo y terminó sufriendo antes de festejar una victoria necesaria.
La primera parte fue un bodrio que se limitó a la lucha en la mitad de la cancha y a una total carencia de ideas de uno y otro lado. Así y todo, Córdoba pudo haber sacado ventaja si el árbitro Alejandro Castro hubiera sancionado un claro penal en perjuicio de Farré, justo sobre el cierre de la etapa. Antes y después, nada.
Cambio de imagen En el complemento la imagen de los charrúas mejoró. Casi desde el inicio comenzó la presión sobre la valla de Cordero y las ocasiones fueron llegando. Primero se lo perdió Yocco con un cabezazo que se fue por sobre el travesaño. Después Cordero sacó al córner un remate de Marinelli y finalmente el palo le dijo que no a un tiro libre del Cabezón Cela Ruggieri.
Pero de tanto ir al final llegó la conquista. Luciano Pignatta sacó ventaja en la azotea en un centro del Chimpa Ferreyra y a cobrar: 1-0 y a otra cosa. Porque aunque mínima, la ventaja terminó siendo decisiva ante un rival que careció de los argumentos necesarios como para intentar la heróica y salir a buscar la igualdad.
Córdoba lleva tres al hilo y no es poca cosa. Justo cuando se viene el final del Apertura los de Tablada entraron en racha positiva. En la era del fútbol resultadista, Córdoba está atravesando por uno de sus mejores momentos, pero todavía necesita tiempo para convertirse en un equipo con mayúsculas. enviar nota por e-mail | | Fotos | | Cela Ruggeri no logra entrar al áera rival. | | |